Gil Marín refuerza a Simeone y zanja cualquier movimiento en el banquillo

Gil Marín ha reaccionado ante los rumores de los últimos días y lo ha hecho con una carta dirigida a la afición, publicada en la web oficial del club, en la que apela «a la unidad» y en la que recuerda que el equipo «ha disputado las diez últimas ediciones de la Champions de manera consecutiva». «Aunque la decepción de esta edición sea grande, no podemos perder de vista la perspectiva general», insiste el CEO rojiblanco.

El consejero delegado ha utilizado un mecanismo epistolar para, de manera indirecta, reforzar la confianza del club en Simeone, a quien dedica una frase cargada de intención que no hace sino demostrar que el club mantiene todos los galones del entrenador argentino: «este grupo, con Diego Simeone como entrenador, nos ha hecho disfrutar de los hitos alcanzados durante esta exitosa década, y merece nuestro respeto y confianza para conseguir los importantes retos que aún tenemos esta temporada». La contundencia con la que se expresa el CEO descarta -como era de esperar- cualquier tipo de movimiento en el banquillo rojiblanco salvo, por supuesto, que quien lo ejecute sea el propio Simeone.

Gil Marín ha tirado del recurso habitual al que recurre en situaciones como ésta y apela a la «unidad» de todos los sectores del club en una carta en la que recuerda que «el club ha crecido mucho en la última década, hasta el punto de estar viviendo el mejor momento de nuestros casi 120 años de historia», aunque también entona el mea culpa y reconoce que «no pretendo justificar nuestra mala actuación en la presente edición de la Champions, todos somos conscientes de que ha sido un fracaso y debemos tener la humildad de reconocerlo».

«Debemos entender que esta atípica temporada, partida con una Copa del Mundo, con lo que ello conlleva para la mayoría de los jugadores, lógicamente está alterando el rendimiento de una plantilla de este nivel», agrega el máximo ejecutivo rojiblanco, que insiste en que «no podemos permitir que ningún factor externo nos desuna en lugar de fortalecer nuestros lazos. La unidad es nuestra gran fortaleza y no podemos perderla».