«Es difícil que Marc Márquez pueda pilotar antes de dos meses»

La grave caída de Marc Márquez en la primera carrera de la temporada de MotoGP ha puesto patas arriba la competición. El catalán se someterá a una operación para reparar el hueso dañado y OKDIARIO ha hablado con un deportista de élite que sufrió esa misma lesión para saber lo que se siente tras romperse ese hueso.

Óscar Pereiro, ganador del Tour de Francia en 2006, confiesa que se trata de una dolencia muy particular y mucho más fuerte que una rotura de clávicula. «Yo tardé cuatro meses en volver a salir a la carretera y un poco más de tiempo en dejar de sentir dolor. Cada vez que cogía un bache en la carretera notaba esa parte del cuerpo mandando un mensaje. Te hace sentir en muchas ocasiones flojera en el brazo», describe el gallego.

Se desconocen los plazos de la recuperación de Marc Márquez al estar todavía muy inflamada la herida y no poder determinarse si está dañada la articulación. «Mi fractura fue muy limpia y se quedó a 10 centímetros del hombro. Cuanto más lejos del hombro o del codo creo que es mejor para que vuelva antes», especifica Pereiro, quien tardó tres en hacer rodillo antes de salir a la carretera.

«Es una lesión muy compleja y de las más difíciles que se puede tener. Yo pienso que como mínimo puede estar dos meses sin pilotar, pero con los motoristas nunca se sabe porque son de goma. A mí me parece complicado que esta temporada pueda competir porque es una lesión que te deja el brazo muy flojo y con todas las cosas que tiene que hacer un piloto sintiendo vibraciones y metiendo gas… Dependerá de si ha dado en la articulación o no, pero no es una rotura de clavícula ni mucho menos», especifica Pereiro.

Veremos si la rotura del húmero cambia en algo la carrera de Marc Márquez, pero lo que parece evidente es que esta temporada andará muy condicionado porque es una lesión que se une a sus maltrechos hombros. El catalán, que aspiraba a su octavo título, tendrá que recuperarse plenamente para batir las marcas de un Valentino Rossi que nunca volvió a ganar un título mundial tras fracturarse la tibia y el peroné en 2010. Que el de Cervera se ande con cuidado, el húmero no es una broma.