Casillas está hecho un lío

Iker Casillas tiene muchas dudas sobre cómo salir del embolao en el que se metió cuando decidió anunciar que se presentaba a las elecciones presidenciales de la Federación Española de Fútbol. El portero, que comenzó fortísimo su candidatura, ha ido perdiendo fuelle durante la pandemia del coronavirus hasta llegar a un punto en que no sabe cómo salir airoso de una situación donde su imagen puede salir muy desgastada.

La duda que invade ahora al ex capitán de la selección española y del Real Madrid es si anunciar que no se presentará o acudir a los comicios y perder por goleada. Iker no sabe qué será lo mejor para su imagen, aunque gente próxima al portero le ha aconsejado que se retire y que prometa presentarse más adelante cuando pueda montar una candidatura seria.

En estos momentos, presentarse contra Rubiales parece una quimera para Casillas por últimos movimientos que han acontecido en el fútbol español. La paz que sellaron en los Pactos de Viana el presidente de la RFEF y Javier Tebas parece que va a ser duradera y sin ese aval de una veintena de votos, todo hace indicar que Iker tiene el futuro más negro que un vampiro mellado.

El único que no ha dejado de apoyar a Iker ha sido su amigo David Aganzo, quien, por otra parte, ha estado más fuera que dentro de la presidencia de la Asociación de Futbolistas Españoles. El sindicalista apenas posee 13 de los 140 votos de las próximas elecciones y su incidencia sería mínima en los comicios.

Por si fuera poco, Rubiales ha demostrado trabajo y eficacia para conseguir dar un final digno a la temporada de fútbol no profesional contentando tanto a los clubes como al Gobierno. El dirigente motrileño ha conseguido salir más fortalecido del coronavirus, mientras que Casillas ha estado totalmente desaparecido.

El portero, muy probablemente, anunciará en las próximas horas su decisión. Lo más lógico es que se retire de la carrera por la presidencia, aunque todo puede pasar. El portero, sin ir más lejos, ha visto como los que se presuponían sus grandes apoyos le han dado la espalda. Ni el Real Madrid, ni Xavi Hernández, ni David Villa ni un sinfín de estamentos futbolísticos han mostrado su apoyo público.