Así es Borja Mayoral: el chico del Seat León por Valdebebas

Borja Mayoral ya es una realidad. El que hasta hace pocos meses era una promesa que apuntaba a seguir el camino que ya hicieron hombres como Raúl o, en un caso más reciente, Álvaro Morata, ya ha dado el salto y se puede afirmar que ha llegado al primer equipo del Real Madrid para quedarse. Eso sí, él sigue reconociendo que tiene claro que su equipo es el Castilla.

Y es que ese es Borja Mayoral. Un hombre de 18 años capaz formar parte del once titular del Real Madrid, de debutar en un derbi frente al Atlético de Madrid y de marcar uno de los goles del año en la UEFA Youth League, todo esto en ocho días. Y su primer pensamiento tras su primer «gol» fue para sus padres y su hermano. Al fin y al cabo “desde pequeño se han chupado viajes y partidos».

Tú al Cerro y yo a Valdebebas

Y es que los inicios de Borja no han sido sencillos para su familia. La exigencia de jugar en las categorías inferiores del Real Madrid provoca que los canteranos se ejercitan entres tres y cuatro veces a la semana. Cuando a esto le añades que otro hijo juega en las categorías inferiores del Atlético el caos es máximo. Eso le sucedió a la familia Mayoral Moya.

Borja comenzó a destacar en el Parla, el equipo de su pueblo, y pronto llamó la atención de los principales clubes de la Comunidad de Madrid. El Real Madrid se adelantó a Atlético y Rayo Vallecano le fichó para La Fábrica en la temporada 2007-2008 para formar parte del Alevín B con tan sólo 10 años. Tiempo en el que coincidiría con que su hermano mayor, Cristian Mayoral, era canterano del eterno rival capitalino. Esto llevó a los padres de los dos futbolistas a cambiar su rutina y multiplicarse para que sus dos hijos cumplieran sus sueños.

Kity, así se conoce a Cristian, tiene ahora 23 años y es jugador de la A.D. Parla. Tras superar una grave lesión de rodilla que le truncó su futuro en el club rojiblanco actualmente ha vuelto al equipo de toda su vida.

Borja, el pequeño, sigue creciendo y está decidido a derribar una de las puertas más blindadas del fútbol, la del Real Madrid. Zidane confía en él y a él le sobra calidad y goles. Eso sí, su reto más inmediato es intentar que el Castilla ascienda.

Sus inicios como centrocampista

Madridista desde la cuna, su carrera comenzó en las categorías inferiores del Parla jugando al Fútbol 7. Su calidad y su físico le daban un plus que le hacían ser un gran mediocentro. No sería hasta que recalase en Valdebebas a las órdenes de Santiago Sánchez y diese el salto al Fútbol 11 cuando empezase a jugar de delantero. Una posición a su medida. Su olfato goleador le hace terminar todas las temporadas entre los máximos goleadores.

Borja ha ido escalando peldaño a peldaño en la cantera blanca. Sólo le faltó jugar en el Juvenil B, porque Luis Miguel Ramis le ascendió a División de Honor. Esta temporada comenzó en el Castilla, a un paso de la gloria, y meses después está en todas las portadas gracias a la confianza que le ha otorgado Zinedine Zidane, uno de su grandes valedores junto a Cristiano Ronaldo. Eso sí, Borja sigue con sus costumbres de siempre. Vive en Parla, sale con sus amigos de toda la vida y, hasta hace poco, se le veía por Valdebebas con un Seat León. Ahora, recién renovado hasta 2021, ha cambiado el auto, pero su humildad no la ha perdido. Ha nacido una estrella.