El truco del papel albal en el horno: sirve para todo y tienes que probarlo

El horno es uno de los electrodomésticos más versátiles y prácticos de la cocina. Con él se pueden preparar desde platos sencillos hasta recetas elaboradas, pasando por postres, panes y pizzas. Sin embargo, el horno también tiene sus inconvenientes, como el consumo de energía, el tiempo de precalentamiento y la limpieza. Para aprovechar al máximo este electrodoméstico y evitar algunos de estos problemas, existe un truco muy sencillo y económico que consiste en usar papel de aluminio o papel albal en el horno. ¿Pero de qué modo? Os lo explicamos a continuación.

El truco del papel albal en el horno

El papel de aluminio es un producto que se obtiene a partir del aluminio, un metal ligero, resistente y maleable. El papel de aluminio se fabrica mediante un proceso de laminación que reduce el grosor del metal hasta obtener una lámina muy fina y flexible.

El papel de aluminio tiene varias propiedades que lo hacen útil para la cocina, como:

• Es impermeable y no deja pasar el aire ni la humedad.
• Es reflectante y devuelve el calor que recibe.
• Es moldeable y se adapta a cualquier forma o tamaño.
• Es reciclable y no contamina el medio ambiente.

En el caso del horno puede ser realmente útil, pero no solo para tapar los alimentos y que estos se cocinen mejor, dado que el papel retiene la humedad y evita que se quemen o que se resequen mientras se cocinan, sino que además, existe un truco que consiste en colocar papel albal dentro del horno y con ello, podremos evitar que se manche más de la cuenta.

Lo que tenemos que hacer es colocar el papel de aluminio en la bandeja o la rejilla del horno, de modo que podamos proteger la superficie de las salpicaduras y las manchas de grasa y suciedad. Y así evitamos no tendremos que estar tanto rato limpiando después el horno.

¿Qué beneficios tiene usar el papel de aluminio en el horno?

A partir de lo explicado, nos damos cuenta de como el papel de aluminio en el horno tiene varias ventajas, como:

• Ahorrar tiempo y energía: Al usar papel de aluminio en el horno, se reduce el tiempo de cocción y se evita tener que precalentar el horno durante mucho tiempo. Además, se ahorra energía al evitar que se pierda calor por las paredes del horno.
• Mantener los alimentos jugosos y tiernos: Al envolver los alimentos con papel de aluminio, se crea un ambiente húmedo dentro del paquete que impide que los alimentos se sequen o se quemen. Así, se conservan mejor los nutrientes, el sabor y la textura de los alimentos.
• Evitar olores y humos: Al usar papel de aluminio en el horno, se evita que los alimentos suelten grasa o líquido que puedan generar olores o humos desagradables. También se evita que se mezclen los sabores de diferentes alimentos que se cocinen al mismo tiempo.
• Facilitar la limpieza: Al usar papel de aluminio en el horno, se evita que la bandeja o la rejilla del horno se manchen o se peguen los alimentos. Esto facilita la limpieza del horno y evita el uso de productos químicos o abrasivos.

¿Qué precauciones hay que tener al usar el papel de aluminio en el horno?

A pesar de sus beneficios, el papel de aluminio en el horno también tiene algunos riesgos que hay que tener en cuenta, como:

• Provocar incendios: El papel de aluminio es un material inflamable que puede arder si entra en contacto con una llama o una superficie muy caliente. Por eso, hay que evitar que el papel de aluminio toque las partes calientes del horno, como las resistencias, los quemadores o las paredes.
• Liberar sustancias tóxicas: El papel de aluminio puede contener trazas de otros metales, como plomo, cadmio o mercurio, que pueden ser perjudiciales para la salud si se ingieren. Por eso, hay que elegir papel de aluminio apto para uso alimentario y evitar cocinar alimentos ácidos, como cítricos, tomates o vinagre, que pueden reaccionar con el aluminio y liberar estas sustancias.
• Alterar el sabor y el color de los alimentos: El papel de aluminio puede reaccionar con algunos alimentos y modificar su sabor y su color. Por ejemplo, el aluminio puede dar un sabor metálico a los alimentos o hacer que se oscurezcan. Para evitar esto, se puede usar papel de aluminio antiadherente o poner una capa de papel vegetal entre el aluminio y los alimentos.