Salud

Sale a la luz la verdadera cura de la resaca: lo acaban de descubrir los científicos

Resaca
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

El alcohol, a menudo asociado con la diversión, puede dejar tras de sí efectos indeseados. La resaca es uno de los malestares más comunes tras una noche de copas, y se caracteriza por síntomas como dolor de cabeza, fatiga, náuseas, malestar estomacal y sensibilidad a la luz. A pesar de la variedad de remedios populares que circulan para mitigar estos efectos, como beber mucha agua o comer frutas, la ciencia ha comenzado a arrojar luz sobre posibles enfoques más efectivos y basados en la evidencia.

Recientemente, un estudio en el que participaron casi 1.700 estudiantes universitarios que habían experimentado al menos una resaca en los tres meses anteriores, encontró una correlación significativa entre el ejercicio físico y la disminución de la intensidad de los síntomas de la resaca. Este hallazgo sugiere que quienes hacen deporte con regularidad pueden experimentar resacas menos severas, lo que abre la puerta a nuevas posibilidades en la prevención de este malestar tan común.

Cómo influye el ejercicio en los síntomas de la resaca

La resaca, como fenómeno fisiológico, se manifiesta principalmente debido a los efectos deshidratantes y toxicológicos del alcohol. El consumo excesivo de alcohol provoca la liberación de acetaldehído, una sustancia tóxica que el cuerpo tiene que procesar, además de alterar el equilibrio de líquidos y sales. Esto afecta al sistema nervioso, provocando dolor de cabeza, fatiga y una sensación general de malestar.

En este contexto, el ejercicio puede ser la mejor forma de aliviar los síntomas de la resaca. Cuando bebemos alcohol, no sólo nos deshidratamos, sino que también el cuerpo responde con inflamación. Esto se debe a que el sistema inmunológico libera unas moléculas llamadas citoquinas, que ayudan a combatir infecciones o lesiones.

Pero, en este caso, las citoquinas pueden aumentar la inflamación y hacernos sentir peor, con dolor de cabeza y malestar en general. Aquí es donde entra en juego la actividad física: se ha demostrado que tiene efectos antiinflamatorios, ayudando a reducir la liberación de estas moléculas y, por lo tanto, aliviando esos síntomas.

Además, cuando hacemos ejercicio, el cuerpo produce endorfinas, las conocidas «hormonas de la felicidad». Estas sustancias químicas mejoran nuestro estado de ánimo u funcionan como analgésicos naturales, aliviando el dolor de la resaca de una forma más efectiva que otros remedios.

Sueño

Las personas que beben alcohol suelen experimentar un sueño menos reparador, lo que contribuye a una mayor sensación de fatiga y sensibilidad al dolor al día siguiente. Sin embargo, la actividad física regular puede ayudar a regular el ritmo circadiano, mejorando la calidad del sueño y reduciendo la cantidad de veces que una persona se despierta durante la noche. Esto puede ayudar a que el cuerpo se recupere más rápidamente de los efectos del alcohol y, por lo tanto, reducir la gravedad de la resaca.

A través de diversos estudios, se ha comprobado que las personas que hacen deporte tienen una mejor calidad de sueño en general. Esto se debe a que el ejercicio, al reducir los niveles de estrés y promover un adecuado equilibrio hormonal, facilita un descanso más profundo y reparador. Un buen descanso, a su vez, puede reducir la sensación de fatiga asociada con la resaca y ayudar a que el cuerpo se recupere más rápidamente, disminuyendo la gravedad de los dolores de cabeza y la irritabilidad.

Metabolismo

El metabolismo juega un papel clave en cómo el cuerpo procesa el alcohol y sus subproductos, como el acetaldehído, responsable de la resaca. Un metabolismo eficiente ayuda a eliminar estos compuestos más rápido, reduciendo la duración de los síntomas. El ejercicio regular mejora la circulación y la función hepática, optimizando la eliminación del alcohol. Esto favorece una mejor distribución de nutrientes y la eliminación de toxinas, incluyendo el acetaldehído. Así, las personas que hacen ejercicio de manera constante podrían experimentar resacas menos intensas, ya que su cuerpo sería más eficaz para procesar y eliminar el alcohol.

Ahora bien, aunque los estudios sugieren que el ejercicio regular podría ayudar a aliviar los síntomas de la resaca, es fundamental entender que no es una solución mágica. La mejor forma de evitar una resaca es, sin duda, evitar el consumo excesivo de alcohol. El ejercicio puede ser útil para mitigar los efectos de la resaca, pero no sustituye la moderación al beber.

Cabe señalar que el se realizó con estudiantes universitarios, un grupo con patrones de consumo y ejercicio que podrían diferir de otros grupos de edad. Tampoco se puede ignorar el riesgo de hacer ejercicio durante una resaca, ya que podría empeorar la deshidratación y el malestar general, sobre todo si no se cuida adecuadamente la condición física del cuerpo.

En resumen, aunque el ejercicio puede ayudar a reducir la intensidad de los síntomas de la resaca, la prevención sigue siendo la mejor estrategia: beber con moderación o evitar el consumo excesivo de alcohol es clave para evitar los efectos negativos al día siguiente.

Lo último en Curiosidades

Últimas noticias