Equinoccio Otoño 2018: ¿Cuándo empieza el otoño?
Oficialmente, el otoño astronómico comienza con el equinoccio de Otoño ¿Pero qué es y cuándo sucederá este año?
La palabra «equinoccio» deriva del latín y significa «la misma noche» ya que tiene que ver con el momento en el que el día y la noche tienen la misma duración de horas, aunque en realidad, debido a los efectos de la refracción atmosférica, en los equinoccios la longitud del día excede, tan solo ligeramente, a la de la noche.
En el hemisferio norte, el equinoccio de otoño generalmente cae el 22 o 23 de septiembre, cuando el sol cruza el plano del ecuador terrestre (perpendicular), en el punto llamado equinoccio. El punto del equinoccio de otoño también se llama punto de Libra. En 2018, el equinoccio de otoño se producirá el domingo 23 de Septiembre (a las 03:54 de la madrugada en España) y ese será el momento en el que oficialmente comenzará nuestro otoño astronómico, que por otro lado, no coincide (en fechas) con el otoño meteorológico.
Podemos decir entonces que para nosotros, el otoño comenzará oficialmente el 24 de Septiembre, mientras que fue el 1 de septiembre, cuando entramos en el otoño meteorológico, el cuál finaliza el 30 de noviembre . A diferencia de las estaciones astronómicas, las meteorológicas comienzan y terminan definidas en cuartos enteros, sobre la base de los promedios climáticos: el invierno meteorológico comienza el 1 de diciembre y finaliza el 28/29 de febrero, la primavera comienza el 1 de marzo y se cierra El 31 de mayo, el verano se extiende desde el 1 de junio hasta el 31 de agosto.
Los astros y mitología en el equinoccio de Otoño
Desde el punto de vista astrológico, la entrada del Sol en Libra, un signo de Equilibrio, nos devuelve al significado latino del nombre. Para los que creen en los astros y como nos afectan, el equinoccio de otoño nos recuerda además que estos son los últimos días cuando las fuerzas están equilibradas y que sigue a cuando la oscuridad ganará en los próximos seis meses, a la luz.
El equinoccio siempre se ha representado en la antigüedad como un momento especial en el que las fuerzas de la luz y la oscuridad están en perfecto equilibrio. Para muchas culturas, el Equinoccio de Otoño es un día de celebraciones. En la tradición iniciática, este momento representa un pasaje, un tiempo para la meditación, para la introspección, durante el cual la separación entre lo que es visible y lo que es invisible casi está desapareciendo. En el calendario agrícola, por desgracia, poco o nada queda del ritual festivo de otoño y hay que esperar hasta el final de octubre con la celebración de todos los Santos para encontrar todavía los antiguos ritos rurales paganos, o lo que los celtas llamaron Samhain.
Pero en la memoria de estas poblaciones antiguas, el equinoccio de otoño se celebraba con el nombre de Mabon: el joven dios de la vegetación y los cultivos, y el hijo de Modron, la Diosa Madre que secuestrado tres noches después de su nacimiento, fue encarcelado durante muchos años, hasta el día en que fue liberado de Culhwch, primo del rey Arturo. Debido a su estancia en Annwn, Mabon se mantuvo joven para siempre.
El equinoccio de otoño es también el tiempo de la semilla, las raíces oficiales, la poda, el compost y el agua.
Durante la Revolución Francesa, desde 1793 hasta 1805, este día se convirtió en el primero del año y en Japón sigue siendo hoy un festival dedicado a los antepasados y la familia.
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