Dos lagos sobre un cráter: el lugar más impresionante que vas a visitar en tu vida

¿Todavía no has elegido destino para las vacaciones de verano? Hoy queremos hablarte de un lugar fascinante que se encuentra muy cerca de España. Se trata de la Laguna de las Siete Ciudades, situada al oeste de la isla de San Miguel, en el archipiélago portugués de Las Azores. El paisaje es impresionante, con un doble lago sobre el cráter de un volcán. Se trata de un lugar único en el mundo que seguro te fascinará.

Laguna de las Siete Ciudades

En el siglo VIII, la isla se dividió en siete comunidades, de ahí su nombre. Además de por la belleza natural del paisaje, este lugar destaca por sus monumentos construidos en piedra volcánica y su arquitectura rural.

Precisamente, la Laguna de las Siete Ciudades es el sitio más visitado de las Azores. Alberga unos 250 volcanes cuyos cráteres están cubiertos por agua. La caldera del macizo se llenó del agua de la lluvia, dando lugar a dos lagos, el Lago Azul y el Lago Verde.

Todo apunta a que la diferencia en el color del agua de ambos lagos se debe a los organismos que habitan en su interior. La mejor forma de disfrutar de este paraje natural es alquilar un coche, iniciar la ruta e ir haciendo paradas en los lugares más importantes.

La primera parada debe ser el pueblo, que también se llama Siete Ciudades. A pesar del paso del tiempo, no ha perdido ni un ápice de su esencial tradicional, así que es un sitio con mucho encanto. El monumento más destacado es la Iglesia Parroquial de San Nicolás, construida con piedra volcánica y de estilo neogótico.

A lo largo del itinerario hay varios miradores que ofrecen unas vistas impresionantes. Desde el Miradouro Vista do Rei se ven a la perfección los lagos Azul y Verde y es posible apreciar la diferencia de color entre ambos. También hay otros que son muy interesantes:

• Miradouro da Boca do Inferno: para acceder hasta él, hay que caminar unos 15 o 20 minutos desde el parking. Desde este mirador se pueden ver los cuatro lagos.
• Miradouro Cerrado das Freiras: aunque no es tan conocido como los anteriores, merece mucho la pena porque desde él da la sensación de poder tocar el agua de los lagos.
• Miradouro da Lagoa de Santiago: ofrece las mejores vistas del Lago Verde rodeado de un bosque que parece impenetrable.

Como puedes comprobar, visitar estos dos lagos sobre el cráter de un volcán es uno de los mejores planes que puedes hacer este verano. ¡Naturaleza en estado puro!