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Por si no lo sabías, al sudeste asiático se lo conoce por ser un escenario prolífico para la identificación de nuevas especies. En 2023, la organización WWF publicó un informe que describe el descubrimiento de 234 nuevas especies en la región del Gran Mekong. Vietnam, uno de los países abarcados por el estudio, destacó por un hallazgo particular: un puercoespín ‘vampiro’.
El puercoespín en cuestión pertenece al género Hylomys, un grupo de pequeños mamíferos poco conocidos fuera del ámbito científico. Estos animales, emparentados lejanamente con los erizos, carecen de espinas y presentan una fisonomía más cercana a la de un ratón de cola corta.
¿Cómo es el puercoespín ‘vampiro’ que descubrieron en Vietnam?
Entre las especies descritas recientemente, nos centraremos en el más curioso: el Hylomys macarong, un pequeño puercoespín originario de las mesetas de Da Lat y Dak Lak, en el sur de Vietnam. Su nombre deriva de la palabra vietnamita ‘ma cà rồng’, que significa vampiro, haciendo referencia a sus largos incisivos superiores, característicos de los machos adultos.
El Hylomys macarong mide aproximadamente 14 centímetros de longitud y posee un pelaje de tonalidad marrón oscura. Aunque su aspecto general puede recordar a una musaraña, su rasgo más distintivo es la presencia de esos incisivos que le otorgan su peculiar sobrenombre.
Según el investigador Arlo Hinckley, autor principal del estudio, estos animales se encuentran activos tanto de día como de noche. Se alimentan de insectos, otros pequeños invertebrados y, ocasionalmente, de frutas.
Su comportamiento se asemeja al de otros Hylomys, anidando en huecos y buscando refugio entre raíces, rocas, troncos caídos y la hojarasca del suelo.
¿Cómo se ha descubierto al puercoespín ‘vampiro’?
La identificación de esta nueva especie de puercoespín fue posible gracias a un enfoque de revisión integral que combinó datos genéticos y observaciones morfológicas. Los investigadores utilizaron muestras recolectadas de museos de historia natural de Asia, Europa y Estados Unidos, algunas de las cuales habían permanecido almacenadas durante más de 80 años.
Para su análisis, el equipo reunió los siguientes elementos:
- 232 especímenes físicos.
- 85 muestras de tejido.
- Datos de 14 colecciones de historia natural.
Las muestras fueron sometidas a análisis genéticos en laboratorios especializados, donde se secuenciaron genomas mitocondriales y varios loci nucleares. Además, se realizaron estudios morfológicos detallados de cráneos, dientes y pelajes.
El resultado fue la identificación de siete linajes genéticos distintos dentro del género Hylomys. Esta diversidad llevó a reconocer dos especies completamente nuevas y a elevar a rango de especie a tres subespecies previamente conocidas.
Se estima que los eventos de especiación en el género ocurrieron entre el Mioceno tardío y el Plioceno temprano, probablemente influenciados por cambios climáticos como el fortalecimiento del monzón indio.
¿Qué tan valioso es este descubrimiento para la región del Gran Mekong?
El descubrimiento del puercoespín ‘vampiro’ y de otras especies asociadas subraya la relevancia de los esfuerzos de conservación en la región del Gran Mekong. Muchas de estas especies presentan áreas de distribución restringidas y se encuentran potencialmente amenazadas por la pérdida de hábitat y el cambio climático.
El estudio sugiere que regiones como el norte de Sumatra y los montes Annamitas del sur de Vietnam son centros de endemismo que merecen especial atención. Además, resalta la importancia de los museos de historia natural como repositorios de biodiversidad aún por descubrir.
Por su parte, Arlo Hinckley, en colaboración con investigadores como Melissa Hawkins del Instituto Smithsoniano, destaca que «la aplicación de técnicas genéticas modernas permitió identificar estos ejemplares muchos años después de su recolección».
El acceso a las colecciones históricas resultó fundamental para llenar lagunas geográficas en el conocimiento de la biodiversidad asiática.