Adiós al moho en las ventanas: el truco que utilizaban las abuelas y es el más efectivo

El truco que usaban las abuelas y es el más efectivo para tener tus ventanas limpias te dejará en shock. Sin duda alguna, estamos ante un tipo de elemento que puede acabar convirtiéndose en nuestro mejor aliado en casa. Un buen ingrediente para hacer que la limpieza de nuestra casa sea muy diferente. Habrá llegado el momento de empezar a prepararnos para vivir una serie de detalles que pueden ser fundamentales y que quizás hasta ahora no habíamos tenido en cuenta con nuestras ventanas.

Son la parte más visible de la casa, desde el exterior y el interior, las ventanas deben estar lo más limpias posibles. De esta manera conseguiremos que nos aporten una serie de detalles que acabarán siendo los que marquen un antes y un después. Por lo que, habrá llegado ese momento de empezar a gestionar algunos elementos que serán los que marcarán un antes y un después. De tal forma, que con los consejos de las abuelas y los de los expertos en limpieza conseguiremos aquello que deseamos, tener las ventanas brillantes con el mínimo esfuerzo posible.

El moho de las ventanas tiene los días contados

No es habitual que aparezca el moho en las ventanas, pero en una temporada en la que la condensación del aire se produce con mayor frecuencia, en la cocina, en el baño o incluso en otras habitaciones, debemos estar muy pendientes de estos elementos. Solo con pequeños trucos, conseguiremos que nos quede una casa lo más limpia posible y que nos dure el máximo tiempo posible.

Llega un importante cambio de ciclo que podemos empezar a gestionar desde casa y que finalmente acabará siendo lo que marque un antes y un después. Estamos volviendo a esos tiempos pasados en los que todo parecía más sencillo y natural, justo lo que necesitamos para lograr acabar con los principales elementos que nos rodean y afectan de lleno.

Las abuelas al igual que las influencers de la limpieza actuales tienen en este ingrediente un buen aliado. Es uno de esos básicos que no debería haber abandonado nunca nuestra casa, sin duda alguna, debemos empezar a aprovechar al máximo, un elemento que puede convertirse en esencial.

Descubre el secreto de limpieza de madres y abuelas, un tipo de jabón que puede acabar siendo el que marque la diferencia.

Este es el truco que usaban las abuelas

Todas las abuelas y madres han tenido en el jabón de Marsella a un buen aliado de aquello que necesitamos. Conseguir que nuestra casa esté lo más limpia posible, con algunos elementos que quizás hasta ahora no habíamos tenido en cuenta y que quizás hasta ahora no habías esperado.

En blogs como el de esturirafi especialistas en este tipo de jabón nos explican que: » El jabón de Marsella (en francés Savon de Marseille) está hecho a base de aceites vegetales y es originario de Marsella (Francia). Los primeros registros de su uso son de 1370 y en 1688 se reguló el uso del nombre para aquellos jabones fabricados únicamente en la zona de Marsella a partir de aceite de oliva (imitando al Jabón de Castilla). Esta normativa sigue vigente, aunque ahora permite el uso de otros aceites vegetales. En el siglo XX la industria del jabón de Marsella tuvo un declive debido al aumento del uso de detergentes sintéticos. A partir de 1980 empezó a resurgir, pero también aparecieron muchas imitaciones, por eso hoy existe la “Unión de Profesionales del Jabón de Marsella”, la UPSM, una asociación bajo la ley de 1901 destinada a defender y promover el jabón de Marsella».

Suele ser mejor el de fabricación casera que tiene multiples usos, como quitamanchas o : «El jabón de Marsella también puedes utilizarlo para lavar a mano la vajilla, sartenes, cubiertos, etc. Sólo tienes que poner un poco de jabón de Marsella en tu estropajo o cepillo y frotar. Para sartenes antiadherentes recomendamos utilizar estropajos de fibras naturales como los de luffa o esparto, para suciedad más incrustada puedes utilizar los cepillos de fibra de tampico y de fibra de coco, ninguno raya».

Incluso hay abuelas que lo usaban para limpiar el suelo: » En el cubo de la fregona añade 3 litros de agua caliente, 1 cucharada de copos de jabón de Marsella, 1 cucharada de vinagre blanco (opcional) y unas gotas de perfume de lavado (opcional). Disuelve removiendo con ayuda de la fregona y limpiar el suelo como siempre».

Además de que no solo lo puedes usar para la limpieza de tu casa, también se puede usar como jabón de uso diario. Siguiendo el mismo blog, nos advierten de que estamos ante un básico que tiene varios usos:

• El jabón de Marsella es ecológico por naturaleza: es 100% biodegradable en menos de 28 días, no contamina el medio ambiente ni el agua a diferencia de otros jabones hechos con productos derivados del petróleo.
• Muy económico, puede durar el doble que un jabón normal.
• Para tu cuerpo. Libre de fragancias o colorantes, el jabón de Marsella es suave e hipoalergénico, no irrita la piel. Además, es recomendado por dermatólogos para personas con problemas en la piel como eccemas o pieles muy sensibles.
• Para tu ropa. Limpia la ropa sin producir alergias. Es muy buen quitamanchas. También se puede utilizar en la cocina, en el baño o para limpiar suelos y alfombras.