Investigado por el abandono de 4 perros enjaulados en Valencia de los que 3 han muerto

Un varón, de 40 años de edad y nacionalidad española está siendo investigado por la Guardia Civil como autor de un supuesto delito de abandono animal. En concreto, por el de cuatro perros, podencos, en la localidad valenciana de Aielo de Malferit.

De los cuatro canes hallados por la Guardia Civil, dos ya habían fallecido. Y el tercero murió horas después. Los perros se hallaban en muy mal estado, como puede verse en el vídeo que ilustra esta información.

En ese vídeo, un agente de la Guardia Civil se aproxima hasta el compartimento en que se hallaba uno de los dos canes vivos encontrados. Y, a pesar del cariño con que llama al animal e intenta darle comida, no consigue que se acerque.

Además, se le han formulado 11 denuncias por supuestas infracciones administrativas a la Ley de Protección, Bienestar y Tenencia de Animales de Compañía y otras medidas de bienestar animal de la Comunidad Valenciana. Las diligencias en torno a este caso han sido entregadas en la Fiscalía de Medio Ambiente de Valencia y en el Juzgado de Instrucción 4 de la localidad valenciana de Onteniente.

Los perros se encontraban en en una instalación de obra con seis compartimentos para albergar canes. Todo ello, dentro de una parcela de 1.406 metros cuadrados. Según el relato de la Guardia Civil había una gran acumulación de heces y orinas caninas de varios días en esos compartimentos. También, los agentes han detectado una gran presencia de garrapatas en todas las instalaciones.

De los cuatro animales que han hallado los agentes, sólo dos estaban vivos. Se trataba de una hembra y de un macho. Ambos se encontraban en mal estado, por lo que de modo urgente se efectuaron las correspondientes gestiones para su traslado a un centro veterinario en otra localidad valenciana: Canals, con un diagnóstico de condición corporal de caquexia, infestación por garrapatas y pulgas con heridas y úlceras en todo el cuerpo y un grado de deshidratación por encima del 10%.

La hembra falleció horas después, según la Guardia Civil. Mientras que el macho pudo ser dado de alta y trasladado a una casa de acogida. Respecto a los canes que fueron hallados ya fallecidos, se trata de dos hembras. Ambos cadáveres se estaban en un avanzado estado descomposición, un elevado grado de caquexia; es decir, un avanzado estado de desnutrición, y abundante parasitación por garrapatas.