El Colegio de Médicos de Alicante crea un protocolo para responder ante las agresiones a los doctores
El Colegio Oficial de Médicos de Alicante (COMA) ha puesto en marcha un protocolo ante la posibilidad de que alguno de sus colegiados sea objeto de amenazas o agresiones, como de hecho ya se ha producido, por parte de los pacientes. Bajo la denominación de ‘Stop Agresiones’, el objetivo es muy claro y responde al lema: ‘Ante las amenazas y agresiones a sanitarios tolerancia cero’.
A finales de enero de este año, agentes de a Policía Nacional detuvieron en Valencia a un varón de 37 años armado con un cuchillo, que amenazaba con poner una bomba en un centro de salud si no le daban el pasaporte covid. Además, insultos, amenazas y agresiones han acompañado la labor de los médicos de atención primaria por parte de determinados pacientes que no aceptaban de buen grado las interminables colas en este verano que ha saturado consultas en centros de salud y hospitales.
Ante esta situación, el Colegio Oficial de Médicos de Alicante (COMA) ha tomado una drástica decisión: ha puesto en marcha una iniciativa para que sus colegiados sepan que están respaldados si sufren cualquier tipo de agresión y/o amenaza.
Así, en la propia página web del citado colegio se puede encontrar un parte para rellenar online con la declaración de lo sucedido en caso de agresión y que puede ser rubricado mediante firma electrónica. Incluso, incluye la posibilidad de consultar con el departamento jurídico ante la posibilidad de abrir la vía de la denuncia judicial gratuita a través del citado colegio profesional.
El afectado debe remitir el formulario al departamento jurídico colegial. En ese formulario quedan identificados el médico, el centro sanitario, el servicio y el paciente o sus familiares. Luego, el Departamento Jurídico analizará los hechos para comunicarlos a la Dirección Territorial de Sanidad para que adopte las medidas previstas en el convenio. Entre ellas, el incremento de medidas de seguridad.
Además, en el supuesto en que el incidente pudiera tener relevancia penal, el médico podrá contactar con el departamento jurídico para recibir asesoramiento, de modo que pueda conocer de primera mano cuáles son sus derechos y cómo llevar a cabo la citada demanda judicial. Se trata de una manera de ofrecer seguridad a los facultativos ante el grave problema que comienzan a suponer ya las agresiones y amenazas a los médicos.