‘CODA’ sorprende y se lleva el Oscar a la mejor película en la gala más afroamericana de la historia

CODA, la historia de una familia sorda, ha sido la inesperada triunfadora de la gala de la 94ª edición de los Oscar, al conseguir la estatuilla de mejor película contra todo pronóstico y desbancando a la favorita, El poder de perro, de la australiana Jane Campion, que sí se llevó el premio a la mejor dirección.

La gala, que este año ha vuelto a tener el mismo aforo de antes de la pandemia, ha estado marcada por el bochornoso espectáculo protagonizado por Will Smith, que se levantó de su asiento para abofetear al actor Chris Rock por hacer chistes sobre su esposa, y ha estado también marcada por la fuerte presencia de personajes afroamericanos, la mayor de la historia. Las quejas de otros años de la mayor minoría étnica en EEUU por su falta de representación en estas ceremonias tan globalizadas, han sido por fin escuchadas por la Academia norteamericana y, en esta ocasión, la gran mayoría de los presentadores y era afroamericana. También ha habido notable presencia latina.

La academia ha querido echar el resto y ha preparado una entrega que pretendía ser «la más espectacular de todos los tiempos», según sus palabras. Una gala que ha cortado por primera vez algunos premios en directo (entre, ellos, el único que ha recibido un español) y ha tenido más vídeos y actuaciones, en un intento en recuperar televidentes.

Aunque el resultado no haya sido tan «espectacular», ha habido grandes momentos, con excepcionales números musicales, un bonito recuerdo a James Bond, el agente más famoso del cine, por los 60 años de la franquicia, y el momentazo impagable del homenaje a El Padrino por sus 50 años, con Francis Ford Coppola, Al Pacino y Robert de Niro en el escenario, presentados por Martin Scorsese.

La gala inclusiva de esta edición ha vivido un incidente muy tenso e inexplicable que ha dejado con la boca abierta a todos los presentes y a los telespectadores. Ha sido cuando Will Smith le ha gritado desde su asiento a Chris Rock: «¡Quita el nombre de mi mujer de tu puta boca!», después de que se levantara y se acercara al escenario a Rock para darle una bofetada. El humorista estaba hablando del peinado de su mujer, Jada Pinkett Smith, que iba rapada porque sufre alopecia y la ha comparado con la teniente O’Neil de la saga G.I. Joe.

Nominados españoles

La gran alegría española llegó pronto, porque antes incluso de que empezara la gala, ya supimos que El limpiaparabrisas, dirigido por el español Alberto Mielgo, se había llevado el Oscar al mejor cortometraje animado. Esta fue una de las ocho categorías que se anunciaron antes de la ceremonia en Los Ángeles. El resto de los nominados españoles, Penélope Cruz, Javier Bardem y Alberto Iglesias, se fueron de vacío.

La maravillosa Jesica Chastain, que había subido como favorita en las últimas horas, se hizo, efectivamente, con el Oscar a la mejor actriz.
Chastain expuso su deseo de vivir “sin miedo a la violencia o al terror”, en un discurso en el que habló de estos “tiempos difíciles”, mensaje que se llevó la evocación general. “En momentos como este pienso en Tammy y me inspiran sus actos radicales de amor”, señaló una emocionada Chastain, quien había recogido el trofeo de manos del veterano Anthony Hopkins.

Jane Campion se ha convertido en esta gala de los Oscar en la tercera mujer que gana la estatuilla dorada como directora. El suyo era uno de los premios prácticamente cantados en esta ceremonia. Ganó el León de Plata de la Mostra de Venecia a la mejor dirección y su labor fue premiada en los Critics Choice, en los reputados Bafta británicos, en los Globos de Oro y en los Directors Guild of America.

Kenneth Branagh se llevó, al menos, el Oscar al mejor guión original por por la maravillosa Belfast, una película muy bien posicionada para los premios en su estreno, pero que luego ha ido perdiendo posibilidades. Ni siquiera ganó el premio gordo en los Bafta británicos.

La mejor actriz de reparto ha sido Ariana DeBose, autoproclamada queer, que vestía un impresionante Valentino de alta costura; rojo, cómo no. Es la tercera vez que dos actores o actrices ganan un Oscar por el mismo personaje: ya lo consiguió Rita Moreno en su West side story.

Troy Kotsur, el primer actor sordo en ganar un Oscar (ya lo logró la actriz Marlee Matlin en 1986), dio pie a un precioso momento cuando todos los asistentes han aplaudido con el lenguaje de los sordos: girando las manos. Por cierto, sólo en este momento y en el de mejor película a CODA, se han traducido los discurso al lenguaje de sordos, como si el resto de la gala sí lo entendieran los espectadores sin audición.

El momentazo musical de la noche llegó con la interpretación por parte de varios cantantes del tema de Encanto, We Don’t Talk About Bruno, que se ha escuchado en el Dolby Theatre de Los Ángeles pese a no estar nominada. La banda sonora, éxito de ventas en Estados Unidos, es de Germaine Franco y el actor Lin-Manuel Miranda, quien no pudo acudir a la ceremonia porque su mujer dio positivo por coronavirus.

El escenario del Dolby Theatre de Los Ángeles, ha tenido por primera vez desde 1987 a tres mujeres conduciendo la gala: Regina Hall (Shaft), Amy Schumer (The Humans) y Wanda Sykes (The Other Two).

Las categorías que se han quedado «fuera de la ceremonia» de los Oscar emitida en directo han sido Mejor Documental, Mejor Montaje, Mejor Maquillaje y Peluquería, Mejor Diseño de Producción, Mejor Sonido, Mejor Cortometraje de Ficción, Mejor Cortometraje de Animación (donde competía el español  y Mejor Banda Sonora.

Entre los encargados de entregar las estatuillas hemos podido ver a Halle Berry, Josh Brolin, Kevin Costner, Jamie Lee Curtis, Jennifer Garner, Jake Gyllenhaal, Woody Harrelson, Anthony Hopkins, Samuel L. Jackson, Lady Gaga, Bill Murray, Uma Thurman, o John Travolta.