Pautas y consejos para criar niños felices

Criar a los hijos es ya en sí todo un reto, pero conseguir hacerlo de manera que sean niños felices y alegres es algo que obsesiona a muchos padres y más tras todo lo que estamos viviendo este 2020 con la pandemia. La clave está en dar amor y confianza a los niños, pero si deseas pautas que sean concretas, podemos hacer un repaso a consejos que son eficaces y que servirán sin duda, para criar niños felices.

Pautas y consejos para criar niños felices

Todos los niños suelen ser felices por naturaleza pero a medida que van creciendo y van viviendo todo tipo de experiencias puede ser que notes como también experimentan sentimientos como el miedo, la tristeza, el enfado o la decepción. Todo ello aunque no lo parezca, es bueno porque forman poco a poco la sensibilidad y carácter del niño, aunque como padres siempre queramos lo mejor para nuestros hijos y esto significa, que sean felices.

De hecho, la felicidad de los niños es lo más importante para los padres y si queremos conseguirlo, la forma más segura de hacerlo es aprender a comunicarte con él: si sabes crear una conexión, que no tiene que estar hecha solo de palabras, el niño o niña estará acompañado a lo largo de su vida de un sentimiento de seguridad que le permitirá llegar todos sus objetivos. También debes recordar que la felicidad es una forma de vida, una especie de actitud que se aprende por imitación. Así que esto es lo que puedes hacer por tus hijos para que formen su carácter de modo que siempre vean el lado positivo y se sientan felices:

• • Juega con el niño o niña. No importa dónde, incluso en casa está bien, pero tómate el tiempo para jugar con tu hijo o hija y, por supuesto, hablar su «idioma» y «someterte» a sus reglas de juego. Debes ser tú el que se integre en su mundo y permitir que te enseñe como se divierte.
  • Permite que tu hijo o hija haga las cosas por su cuenta. Puede que a veces sea difícil, pero darle un poco de independencia a los niños ayuda a transmitir el mensaje de que cometer errores también está bien. Y sobre todo que nunca debemos rendirnos.
  • Pon límites. No tienes que ser un padre o una madre que dice «sí» a todo. A la mayoría de los niños no les gusta irse a la cama ni obedecer. Esto no significa que tengas que dejarlos hacer lo que quieran. Tú eres la persona adulta, su padre o madre  y no su amigo/a; asegúrate de que comprendan la diferencia.
  • La importancia de leerles por la noche. Hazlo parte de su rutina nocturna. El cuento antes de dormir es un clásico, pero también podría ser una costumbre para el fin de semana por la tarde. Ayudará a tu hijo o hija a desarrollar el lenguaje, pero también creará un vínculo mayor entre tú y tu hijo/a que hará que en el fondo sienta alegría y felicidad por ese tiempo que pasáis juntos.
  • Encuentra tiempo para ti. Un padre o madre feliz, que no descuida su tiempo y que se realiza a sí mismo, es un mejor padre o madre, incluso si el tiempo que pasa con los niños no es mucho. No renuncies a todo, cuídate y enséñale cómo convertirse en un adulto pacífico. Que vea que tú eres feliz con lo que tienes o con lo que consigues día a día para que seas un buen ejemplo y un buen espejo en el que mirarse.