PP y Vox acuerdan eliminar antes de julio el requisito de catalán en el Ayuntamiento de Palma

PP y Vox acuerdan eliminar antes de julio el requisito de catalán en el Ayuntamiento de Palma en plazas que no sean de atención presencial y de cara al público. Todo ello después de que el gobierno en minoría del PP aceptara hoy en la Comisión de Servicios a la Ciudadanía una iniciativa presentada por la formación presidida por Santiago Abascal en la que se exigía al alcalde Jaime Martínez definir antes del 1 de julio los puestos de trabajo dentro del Ayuntamiento de Palma o de las empresas y organismos municipales que requieran el requisito de catalán.

Así lo acordó ya el pleno en septiembre del año pasado, y en principio, el equipo de gobierno del PP dio el visto bueno a la iniciativa.

No obstante, solicitó disponer del tiempo necesario para poder estudiar con detalle los puestos de trabajo, tanto de la Corporación municipal como de las empresas y organismos municipales, en los que se considera necesario la acreditación lingüística del catalán.

Pasados ya seis meses, Vox lamentaba en su propuesta que el requisito de catalán aún «se exige de forma excluyente para la promoción interna o cambio de puesto de trabajo dentro de la misma empresa o área de gobierno».

Ahora será el pleno que el Consistorio celebrará el próximo día 27 el que de nuevo corrobore la propuesta cuyo cumplimiento tendrá que hacerse efectivo en todas las convocatorias de acceso a la función pública desde el próximo mes de julio. Para ello el gobierno municipal tendrá que modificar este apartado lingüístico en la relación de puestos de trabajo (RPT) en todas las plazas que no sean de atención al público, y negociar la medida con los sindicatos.

Hay que recordar que según sentencia del Tribunal Constitucional, la configuración de la lengua como requisito excluyente sólo encontrará justificación en su adecuación al principio de necesidad.

Es decir, cuando se trate de funciones públicas que tengan «una incidencia directa» en la garantía del derecho a la utilización en las relaciones jurídicas administrativas de la lengua cooficial y donde sea necesario el conocimiento de ambas lenguas. Es el caso de los empleados públicos destinados a funciones de atención presencial y directa al ciudadano (ventanilla), pero no tiene razón de ser en el resto de plazas.

La propuesta de Vox tenía siete puntos, de los que el PP ha apoyado cinco y rechazado dos, en ambos casos, junto a las formaciones independentistas y de izquierdas del anterior gobierno, ahora en la oposición, que se han opuesto a todos los apartados. En concreto se ha dictaminado desfavorablemente los puntos uno y dos de la proposición.

En el primero de ellos Vox exigía que todos los documentos oficiales del Ayuntamiento de Palma, así como los de las empresas municipales y organismos autónomos, sean redactados tanto en catalán como en castellano. Las comunicaciones, apuntaban, se harán en cualquiera de las dos lenguas oficiales.

También ha sido rechazada la propuesta del partido que en el Ayuntamiento de Palma lidera el concejal y portavoz, Fulgencio Coll, para que toda la normativa del Ayuntamiento y de las empresas municipales y organismos autónomos estén escritos en ambas lenguas, antes del mes de julio 2024, al igual que toda información o norma de debido cumplimiento ciudadano. Y en los casos que se estime necesario, se hará en otras lenguas oficiales de países extranjeros.

Por contra el PP si apoyó otras peticiones de Vox en esta misma moción, comprometiéndose a que todos los ciudadanos obtengan la información o respuesta en cualquiera de las dos lenguas oficiales.

También a que la web del Ayuntamiento de Palma y de las empresas municipales y organismos autónomos, contemplarán las dos versiones, una en catalán y otra en castellano, al igual que las publicaciones de las redes sociales deben combinar la utilización de ambas lenguas de forma equilibrada y a que a partir del mes de abril, se sustituya el dominio palma.cat por el de palma.es.