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La caótica sanidad de Armengol: un hospital no puede ingresar pacientes por falta de médico internista

Hospital Formetera
La consellera de Salud, Patricia Gómez, y la presidenta Armengol.

La sanidad de Francina Armengol sigue siendo caótica, especialmente en  Ibiza y Formentera. A la falta de oncólogos, cardiólogos y médicos de Atención Primaria que  se produce desde hace dos años se suma ahora un hecho inaudito y es que el Hospital de Formentera se ha quedado sin médico internista. Es algo especialmente grave dado que en estos momentos ningún paciente puede ser ingresado en el Hospital de Formentera al no haber ningún internista que pueda controlar su evolución.

Desde finales de enero, los pacientes que requieren un ingreso son derivados al Hospital Can Mises de Ibiza.

No es la única carencia denunciada por personal del Hospital de Formentera. Según desvela el Diario de Ibiza y Formentera, el área de ginecología se encuentra ahora en una situación muy precaria.

Hasta ahora el servicio de medicina interna se cubría con dos especialistas mediante guardias de 24 horas durante quince días cada uno. El problema es que uno de ellos se ha marchado por asuntos personales. Quedó sólo un internistas y al acabar su periodo de quince días de trabajo no se ha cubierto la vacante y el Hospital de Formentera se ha quedado sin internista.

Sin internista no puede haber ingresos de pacientes y el traslado a Ibiza resulta muy incómodo tanto para el enfermo como para sus familiares.

Según cuenta Diario de Ibiza y Formentera, la marcha de uno de los internistas se produjo a principios de enero y desde entonces cada quince día el área de medicina interna queda totalmente descubierta. El Área de Salud de Ibiza y Formentera, departamento de la Conselleria de Salud que preside la socialista Patricia Gómez, asegura, sin embargo, que la falta de internistas se produce sólo desde la pasada semana.

Ahora, la solución que se baraja es la misma que se ha adoptado frente a la falta de oncólogos y cardiólogos como es desplazar puntualmente médicos de otro hospital, en este caso desde el de Can Mises de Ibiza. En Ginecología ya se hace así. De todos modos, se descarta que se desplace algún internista a diario de Ibiza hasta Formentera porque el servicio está muy exigido en estas fechas en la mayor de las Pitiusas por la gran demanda asistencial.

Es un ejemplo más de la precaria situación que sufre la sanidad pública en Ibiza y Formentera  El pasado 18 de diciembre OKDIARIO publicaba que debido a la falta de oncólogos se estaba ofreciendo atención médica a los enfermos de cáncer por vía telefónica.

Las asociaciones contra el cáncer llevan meses denunciando la falta de oncólogos en el Hospital Can Mises de Ibiza y calificaron de «inaceptable» que se atienda a los enfermos por teléfono.

Por otra parte, la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Islas Baleares (ADSP-IB) denunciaba en diciente que el área de cardiología se encontraba bajo mínimos. En aquel momento, de cuatro especialistas en Cardiología, dos habían solicitado traslado a otra comunidad autónoma y una se encuentra esperando su jubilación.

En parte la falta de médicos en Ibiza y Formentera se debe al elevado precio de la vivienda pero también a la exigencia del requisito del catalán. A pesar de ello, el Govern de Armengol acordó a principios de este mes de febrero volver a exigir el requisito de catalán a médicos y enfermeras de forma inmediata en las categorías menos deficitarias. En el resto de categorías se dará un plazo de dos años para acreditar el nivel de catalán.

Un día antes de esta decisión, Armengol afirmaba que lo más importante era la salud y reconocía el grave déficit de médicos y enfermeras en la sanidad pública de Baleares que ha generado la exigencia del catalán, un déficit que se verá agravado en los próximos dos años cuando se jubilen unos 450 sanitarios. Con la exigencia del catalán, cubrir las vacantes resulta muy complicado en la red sanitaria pública de las Islas. Esto es lo que opinaba la mandataria socialista hasta horas antes de la celebración del pleno del día 2 de febrero cuando rectificó para volver a exigir el catalán a los sanitarios.

Sucedía todo esto cuando no hay oncólogos en Ibiza y Formentera para atender enfermos de cáncer, faltan cardiólogos en el Hospital de Menorca, hay 300 vacantes de médicos de Atención Primaria, según viene denunciando el Sindicato Médico de Baleares (SIMEBAL), y las urgencias de los hospitales de Inca y Son Espases están totalmente colapsadas y todo ello por la fuga de médicos y las dificultades para cubrir plazas que ha provocado la exigencia del catalán, como advierte OKDIARIO desde hace 15 meses.

El Govern de Armengol había decidido aparcar la exigencia del catalán ante la emergencia sanitaria pero la presidenta no pudo soportar las presiones de sus socios de Més, que habían amenazado primero con dimisiones y en las últimas horas con medidas más drásticas que ponían en un aprieto la continuidad del pacto de izquierdas.

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