Podemos ataca a Olona por su edad: «Es una señora con más años que un bosque que provoca a chavales»

El pasado lunes, Macarena Olona, ex diputada de Vox y abogada del Estado, acudió a la Universidad de Granada para impartir una conferencia sobre derechos constitucionales, un acto que fue boicoteado por la violenta oposición de radicales encapuchados de izquierdas. Sin embargo, Podemos Sevilla, a través de un retuit del mensaje de Mari Carmen Montero—sindicalista de CCOO y militante y responsable de Organización de Podemos Sevilla—, ha calificado a Olona como «una señora con más años que un bosque» que fue a «provocar a chavales y chavalas» en el campus. Como curiosidad, cabe destacar que la líder de Podemos Sevilla, Susana Hornillo, tiene 48 años, es decir, tres años más que Macarena Olona.

Una señora, con más años que un bosque, provocando a chavales y chavalas que le demuestran que su discurso de odio no tiene cabida en la universidad. https://t.co/GewtG5m19e

— ۞ M Carmen Montero ۞ (@MCarmen_Montero) March 18, 2025

El mensaje, publicado originalmente por Mari Carmen Montero (@MCarmen_Montero), hace referencia a un vídeo compartido por el usuario @caminantes21, en el que se observa a Olona enfrentándose al grupo de estudiantes que intentaban bloquear su acceso al Paraninfo de Derecho de la Universidad de Granada. Según el post, Olona habría utilizado su presencia para generar confrontación, mientras que los jóvenes demostraron que su discurso «de odio no tiene cabida en la universidad».

Este comentario, respaldado por Podemos Sevilla al retuitearlo, subraya la percepción de que la visita de Olona fue una provocación, más que un ejercicio legítimo de la libertad de expresión. Mari Carmen Montero, sindicalista de Comisiones Obreras (CCOO) y militante y responsable de Organización de Podemos Sevilla, intenta utilizar su influencia en las redes para posicionar esta narrativa, alineándose con las posturas de su partido y sindicato.

Sin embargo, los hechos muestran una realidad distinta. Olona llegó al campus acompañada de un fuerte dispositivo policial para garantizar su seguridad y poder ejercer su derecho a hablar libremente, como corresponde a cualquier ciudadano en una democracia. Los radicales, muchos de ellos encapuchados, intentaron impedir su entrada mediante empujones, gritos y actos de violencia física. Olona denunció haber sido agredida, con manifestantes tocando «zonas íntimas» y arrancándole el pelo «hasta hacerla sangrar», lo que llevó a la ex diputada a presentar una denuncia judicial por las agresiones sufridas.

Las imágenes del suceso reflejan un enfrentamiento físico entre Olona, los manifestantes y las fuerzas de seguridad, con momentos de gran tensión en los que la abogada tuvo que ser protegida por la policía ante la hostilidad de los radicales. Según el Sindicato Unificado de Policía (SUP), los agentes también sufrieron lesiones mientras intentaban garantizar la libertad de expresión de Olona, defendiendo que impedir su acceso a la universidad atenta contra este derecho fundamental.

El debate que ha surgido en torno a este incidente no es nuevo. Olona ya había sido objeto de enfrentamientos similares en 2022, cuando su aparición en la Universidad de Granada desató protestas y violencia, generando un intenso debate sobre los límites de la libertad de expresión y el derecho a la protesta.

En aquella ocasión, su presencia también fue cuestionada por estudiantes y sectores de izquierda, quienes argumentaron que su discurso, asociado con el ultraderechismo, no debería tener cabida en un espacio académico. Sin embargo, voces de la derecha, como el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, defendieron que la universidad debe ser «el templo de la libertad», criticando las acciones de los manifestantes.