Garmin Vívomove, entre un reloj tradicional y un smartwatch 

Parece que los últimos datos de las compañías que estudian el mercado de wearables indican que las ventas de pulseras para salud y deporte empiezan a superar a las de relojes inteligentes. Entre las causas está seguramente su menor precio, su sencillez y su mayor autonomía con respecto a los relojes con funciones más avanzadas, que prometen muchas prestaciones; pero que casi siempre son muy lentos y limitados frente a un smartphone, y tienen el inconveniente de precisar cargarlos casi a diario. Pues bien, junto a estos relojes inteligentes “convencionales” se han desarrollado alternativas como los relojes Pebble o los relojes “semi inteligentes” como los que fabrica Withings (recién adquirida por Nokia) o este nuevo reloj de Garmin, el llamado Vívomove, que promete sólo dos funciones inteligentes, pero a cambio ofrece un estilo mucho más tradicional de reloj, un precio asequible y sobre todo una autonomía de nada menos que un año.

Aunque Garmin está especializada en pulseras y relojes para deporte bastante más avanzados, el nuevo Vívomove tiene un aspecto sencillo y elegante de reloj convencional aunque con un diseño muy moderno. La esfera cuenta con índices marcando las horas y a los lados dispone dos indicadores en forma de arco que sirven para mostrar la información de los sensores inteligentes: los pasos caminados, la calidad del sueño y las calorías consumidas.

El reloj no tiene mucho más y parece que no incluye alarma por vibración, ni notificaciones del smartphone ni nada parecido, pero es sumergible hasta 50 metros y está disponible en distintos estilos, materiales y colores. Los modelos básicos parten de 150 dólares (con correa de goma), las versiones con correa de piel ascienden a 200 dólares y la versión con caja en acero y correa de piel cuestan 300 dólares, lo que los sitúa ya muy cerca de los relojes inteligentes de las grandes marcas como LG, Apple o Samsung, aunque como decimos el concepto es muy distinto.