El hijísimo se pega la vida padre paseando en un mega yate con una bandera de España de 2 metros
Josep Pujol se pega la vida padre. Basta con ver la imagen del hijo del ex president de la Generalitat para apreciar que no «va con una mano delante y otra detrás», como aseguró Marta Ferrusola en la comisión del Parlament que investiga al clan Pujol al referirse a que la familia no tenía «ni cinc».
A bordo de un velero de 40 metros y con bandera española –de unos 2 metros de largo por 1,5 de ancho– Josep ha disfrutado de unos días de asueto en las aguas de Formentera ajeno al procés, al encarcelamiento de su hermano mayor Jordi o a que la Fiscalía Anticorrupción considere que el clan familiar actuaba coordinado como una «banda criminal organizada».
El tercer hijo del matrimonio Pujol-Ferrusola llegó a las islas Baleares, a Ibiza concretamente, posiblemente desde Miami donde tiene fijada su residencia, a bordo de un jet privado. Del aeropuerto al mar, acompañado de su mujer Laura Vila. Los días de calor sofocante que auguran la llegada del verano han sido propicios para largas jornadas a bordo de la embarcación, disfrutando de deportes náuticos y de chapuzón en chapuzón tras largas y entretenidas charlas con sus anfitriones.