En España un 14,8% de la población padece prediabetes

Las sociedades científicas están de acuerdo en advertir que la prediabetes merece ser tratada como una enfermedad seria. Se habla de prediabetes cuando los niveles de glucosa en sangre de una persona son más elevados de lo normal, pero no lo suficiente como para diagnosticar diabetes tipo 2.
En España, según datos del estudio [email protected], un 14,8% de la población está en esta situación.

Esta semana, investigadores de la facultad de medicina de la Universidad Johns Hopkins (EE.UU.) han publicado su análisis las historias clínicas de una amplia base de datos de pacientes para entender mejor la situación de las personas con prediabetes y emitir recomendaciones que permitan abordar esta condición con mayor eficacia. El trabajo indica que el 13% de una base de más de 3.800 individuos padecía prediabetes. Se asignó a estos pacientes terapia con un nutricionista o bien medicación (metformina) para prevenir que acabaran desarrollando diabetes tipo 2.

Eva Tseng, jefa del equipo de investigación, explica que se observó a los pacientes en un periodo de cinco años, incluyendo en el seguimiento análisis de sangre para evaluar su nivel de glucosa durante los tres meses previos (A1C). En las personas con prediabetes, los valores de A1C van de 5,7 a 6,4. Se consideran normales los resultados de A1C por debajo de 5,7.

Además, los investigadores tuvieron en cuenta si a las personas en cuestión se les había diagnosticado prediabetes y si sus médicos les habían prescrito terapia, bien nutricional o bien farmacológica.

«Podría haberse evitado»

Su hallazgos, ha explicado la experta, son similares a los de otros estudios y otras poblaciones: «El 6% de los pacientes evaluados acabaron desarrollando diabetes en los 12 meses siguientes, pero son personas que podrían haberlo evitado. Nuestros resultados muestran que hay un considerable margen para mejorar la identificación y la atención a las personas con prediabetes en nuestro sistema de salud y en muchos otros lugares», dice Tseng.

Recomienda realizar cribados para identificar la prediabetes y, si se diagnostica, buscar el tratamiento más adecuado en cada caso.

«Queremos asegurarnos de que los pacientes son conscientes del diagnóstico y de los pasos que deben dar ante la prediabetes. Esperamos crear un diálogo para establecer estándares de atención, con metformina y terapia nutricional», añade.

Protocolo de actuación

En España, la Sociedad Española de Diabetes (SED), la Sociedad Española de Arteriosclerosis (SEA) y la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) han elaborado un protocolo para la detección y el tratamiento de la prediabetes. De acuerdo con estas sociedades científicas, los cambios adecuados del estilo de vida reducen de forma significativa el riesgo cardiovascular que acarrea la prediabetes (además de la diabetes tipo 2).

En su manejo se inclinan por recomendar un patrón saludable de alimentación, actividad física regular, evitar el consumo de tabaco y cuidar la higiene del sueño.

El protocolo indica que «en la relación entre nutrición y estas enfermedades metabólicas es fundamental dirigir los esfuerzos a prevenir el aumento de peso o a reducir su exceso en caso de sobrepeso u obesidad, y personalizar el tratamiento para el empoderamiento del paciente».

En su análisis de 2020 sobre las guías de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) y la Sociedad Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD) sobre el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares en pacientes con diabetes mellitus (DM) y prediabetes, los expertos de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) lamentan que esos documentos afirmen que la prediabetes no supone un incremento de RCV, «lo que está en contradicción con otras guías recientes y la evidencia epidemiológica».