Sumar, la izquierda sumisa ante el sanchismo
Lo de Sumar es para nota: estalla el caso Errejón por un presunto delito de acoso sexual y la formación de Yolanda Díaz borra cualquier alusión a este tipo de conductas en su ideario político, en lugar de aplicar la política de «tolerancia cero». O sea, en lugar de extremar el control, escurre el bulto. Y ahora, cero menciones a la corrupción. Será por aquello de echarle un cable a su socio de Gobierno.
Por cierto, a este paso Sumar termina convertida en una sucursal del sanchismo. ¡Qué manera de tragar! El nuevo ideario de Sumar ante su Asamblea de 2025 no recoge ni una sola medida contra la corrupción, a pesar de que en su programa electoral para las elecciones generales de 2023 sí que abordaba este asunto. Caramba con la izquierda, qué digna se ponía cuando gobernaba el PP y alzaba su voz contra la corrupción y que manera de enrocarse ahora que los escándalos han llegado a los mismísimos pasillos de la Moncloa.
El nuevo documento político en el que se define el rumbo de la formación tras la dimisión de Yolanda Díaz el pasado mes de junio ante el batacazo electoral en los comicios europeos no recoge mención alguna a las conductas que atenten contra la integridad sexual ni referencia tampoco a las conductas corruptas. Ancha es Castilla. Dice Sumar que «con vistas a clarificar el rumbo, el presente documento definirá los principios del Movimiento Sumar, que expresen con claridad qué defiende nuestro proyecto y que sirvan para clarificar nuestra acción política, ideológica y cultural».
Pues bien: el documento aludido es una forma de irse por los cerros de Úbeda. Pero al modo comunista. O sea, ponerse de canto y tirar para adelante. ¿Quién les ha visto y quién les ve? ¿Errejón, quién es Errejón? ¿Corrupción, qué es eso de la corrupción? Lo de Yolanda Díaz es todo un retrato de la izquierda sumisa ante el sanchismo.