A Sánchez le sale el tiro por la culata con su maniobra contra Ayuso

Si bien hay un porcentaje significativo de madrileños que piensa que el caso de las irregularidades fiscales de su pareja puede influir en las expectativas electorales de Isabel Díaz Ayuso (un 38,3% frente a un 47,4% que considera que no tendrá incidencia), lo cierto es que la presidenta madrileña apenas vería reducido su porcentaje de apoyos en medio punto y mantendría una holgada mayoría absoluta de 69 escaños, uno menos que los cosechados en los comicios de mayo. Curiosamente el PSOE, que está tratando de convertir el asunto en un escándalo de dimensiones colosales para contrarrestar los efectos del caso Koldo, es el que sale peor parado, un efecto bumerán que se traduce en que los socialistas se dejarían dos escaños que irían hacia Más Madrid, que rompería de ese modo la igualdad en diputados con los socialistas. Si en las autonómicas de mayo del pasado año ambos obtuvieron 27 asientos en la Asamblea madrileña ahora la ventaja de la formación integrada en Sumar lograría 30 por 25 del PSOE.

Por lo demás, según la encuesta de Data10 para OKDIARIO, Vox mantendría sus 11 representantes. La conclusión es que los socialistas pagan más caro la deriva de Pedro Sánchez y su indigna claudicación frente al separatismo que Ayuso el caso que afecta a su pareja. En parte porque resulta obvio que el PSOE está utilizando de forma grosera el asunto y que su pretensión de tapar su corrupción con las presuntas irregularidades fiscales de la pareja de la presidenta madrileña es una burda maniobra para desviar la atención. O sea, Ayuso mantiene casi intacta su fortaleza electoral mientras el PSOE sigue con su interminable declinar en Madrid. El sanchismo es una losa que frustra cualquier intento de recuperación del socialismo madrileño. Y es que las vergüenzas de Pedro Sánchez son tantas que ni recurriendo a sucias estrategias de distracción consigue levantar cabeza. Ayuso sigue en unos aplastantes niveles de apoyo electoral por mucho ruido y porquería que el socialcomunismo trate de esparcir.