El campo, contra el socialcomunismo empobrecedor

El campo, contra el socialcomunismo empobrecedor
El campo, contra el socialcomunismo empobrecedor

Ya no aguanta más: el sector del campo, destrozado por la incapacidad manifiesta en la gestión del Gobierno socialcomunista, se manifestará el domingo 20 de marzo en Madrid. Pocas reivindicaciones más justas que la de un colectivo que vende a pérdidas sin que el Ejecutivo de Pedro Sánchez haya hecho nada por aliviar su situación. Todo lo contrario, desde el Gobierno de España se le ha demonizado. «El domingo, 20 de marzo de 2022, se hace un llamamiento a todo el mundo rural, a quienes deseen conservar las tradiciones y los usos y costumbres de nuestro campo y a quienes desean apoyar la existencia de un mundo rural vivo a asistir y participar en la gran manifestación que se desarrollará en el centro de la capital de España», asegura el manifiesto de los convocantes.  «Basta a los continuos ataques y desprecios del Gobierno», subrayan.

Los promotores son la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA), la Federación Española de Caza, Oficina Nacional de la Caza, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Alianza Rural, Cooperativas Agro-alimentarias y la Federación Nacional de Regantes de España, a los que se han unido decenas de asociaciones y organizaciones en defensa de todos los sectores del campo: ganadería, agricultura, cooperativas agroalimentarias, caza, tauromaquia, comunidad de regantes y otros colectivos afectados por la negligente desidia del Gobierno de Pedro Sánchez.

En definitiva, los convocantes pretenden que Madrid sea un clamor contra el socialcomunismo empobrecedor que está dejando literalmente morir a un sector fundamental. Y es que bajo el sedicente mantra de la sostenibilidad, el Gobierno ha colocado al campo español en su diana sectaria promoviendo medidas legislativas excluyentes en material ambiental, cuando no hay nadie más comprometido con la ecología que esta gente que trabaja sin descanso para asegurarse un sustento que se ha vuelto imposible. El socialcomunismo busca su extinción, razón de más para que el domingo 2o de marzo las calles de Madrid estallen en un grito unánime contra un Ejecutivo que se ha convertido en el mayor enemigo del campo español.

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