El mejor Ricky Rubio siempre aparece en Asia

Ricky Rubio vive un idilio con Asia. El base catalán experimenta un subidón de rendimiento cada vez que compite en este continente y a los hechos nos remitimos. Se dio a conocer al mundo con 17 años impresionando en los Juegos Olímpicos de Pekín, en 2019 se hizo con el MVP del Mundial de baloncesto en China tras llevar a España a la victoria y ahora en Japón se ha erigido en el líder de la selección por delante incluso de los hermanos Gasol.

«Tendré que venir a retirarme aquí», bromea Ricky a la pregunta de OKDIARIO sobre su rendimiento especial en Asia. «Al final creo que son casualidades, aunque sí reconozco que los tres mejores torneos que he jugado con la selección española han sido aquí. Una anécdota, aunque divertida», añade el nuevo jugador de los Cleveland Cavaliers.

Rubio firmó ante Argentina su tope anotador con la selección española en un partido alcanzando los 26 puntos. Esa puntuación se une a un primer día impresionante ante Japón donde volvió a ser el máximo encestador del equipo con 20 puntos, además de repartir 9 asistencias. El base está pletórico de confianza y una muestra de ello es que frente a la albiceleste se quedó a un triple del máximo de su carrera en su partido.

Los tiempos aquellos en los que Ricky no tenía confianza en su tiro y las defensas rivales le flotaban sistemáticamente han pasado a mejor vida. No en vano, el español parece haber alcanzado el nivel que prometía desde adolescente, aunque sus compañeros defienden que esta versión de Rubio viene de lejos.

A la pregunta acerca de si el juego de Ricky Rubio ha alcanzado un nuevo nivel, su amigo Sergio Llull tiene claro que lleva tiempo sacando sobresaliente partido tras partido. «No sé si viste el Mundial de China, pero era una exhibición tras otra. Creo que sigue en esa línea y para mí es un gustazo verle jugar y un gustazo estar a su lado. Es nuestro líder en la cancha junto con Marc y son los pilares en los que nos asentamos para conseguir los objetivos», aseveró el madridista.

Ricky Rubio tiene la prueba de fuego este domingo ante el mejor jugador del planeta para muchos, Luka Doncic. Si contra el esloveno mantiene su nivel más de un ejecutivo de la NBA que lo ha tratado como mercancía se va a llevar las manos a la cabeza. El base es el líder de un equipo llamado a ganar en Tokio.