Obama, Hollande y May confirman su asistencia al homenaje a Peres en Israel, España envía a Margallo

«No hay un capítulo de la historia de Israel en el que Simon Peres no haya escrito varios de los párrafos más importantes». El actual presidente del Estado israelí, Reuven Rivlin, ha dibujado la metáfora más expresiva del agradecimiento que todos los judíos, residentes o no en el «pequeño país» mediterráneo, sienten por el histórico líder fallecido este miércoles a los 93 años de edad en el Hospital Tel-Hashomer de Ramat Gan, cerca de Tel Aviv. Este viernes, líderes de una treintena de países, acudirán a la capital israelí a rendir homenaje a este «luchador por la paz en Oriente Próximo». Barack Obama, François Hollande y Theresa May son sólo algunos de los mandatarios que han confirmado ya su presencia.

«Deja el futuro, lo que importa es el presente». Ésa fue la máxima que presidió la vida de Simon Peres. Primero general, siempre político y último de los fundadores vivos del Estado de Israel, Simon Peres fue jefe de Gobierno, ministro de diferentes carteras, entre ellas Defensa y Exteriores, en varias ocasiones, con Peres desaparece también el último ganador de aquel Premio Nobel de la Paz de 1994, la última gran y verdadera rendija abierta a la reconciliación en Oriente Próximo.

Aquel año, Yasir Arafat por el lado palestino e Isaac Rabin y Simon Peres por el israelí fueron galardonados tras la firma de los Acuerdos de Oslo que sellaba la creación de la Autoridad Nacional Palestina e iniciaba el camino hacia la solución de «paz por territorios». La histórica foto en los jardines de la Casa Blanca incluyó a un orgulloso Bill Clinton, entonces presidente de Estados Unidos, aplaudiendo a los tres líderes. El hoy esposo de la candidata demócrata también ha confirmado su presencia en Jerusalén este viernes.

Peres sufrió un accidente cerebrovascular grave precisamente el 13 de septiembre pasado, el día en que se cumplía el 23º aniversario de aquella histórica escena, primera en que un líder palestino estrechaba la mano en público a los por entonces primer ministro, Isaac Rabin, y ministro de Exteriores, Simon Peres.

Según fuentes del Departamento de Exteriores israelí, los actos de funeral por el ex presidente Peres darán comienzo a las 11.00 hora local (10.00 horas en España), si bien aún no están diseñados al detalle. «Será una ceremonia inmensa, y todo dependerá de las confirmaciones que vayamos recibiendo». A falta de nuevos contactos, España ha decidido enviar al ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo.

Junto al jefe de la diplomacia española, y según el protocolo, se sentarán el príncipe Carlos de Inglaterra; el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko; y el jefe del Estado rumano, Klaus Iohannis. Otros de los dignatarios que ya han confirmado su asistencia son la reina Beatriz de Holanda ; el presidnete de Alemania, Joachim Gauck; y el de México, Enrique Peña Nieto. Además, Rusia y China han confirmado que enviarán una «alta representación de sus gobiernos», según las mismas fuentes, si bien aún no han concretado el nombre de sus representantes.

¿Y los países árabes? «Hasta ahora, no tenemos seguridad de cuáles de nuestros vecinos enviarán una delegación», afirman desde la Embajada de Israel en España, pero cuentan con que «el legado de Peres» será suficiente para que muchos no falten.

«El presente es de los jóvenes; déjenme a mí el futuro, tengo tiempo»

Peres ha sido una figura admirada entre los países aliados de Israel y, como mínimo, respetada entre sus enemigos tras haber ocupado todos los puestos políticos de responsabilidad desde la fundación del país en 1948, por cuyo desarrollo se empeñó y por cuya convivencia pacífica con sus vecinos se comprometió.

Peres, pese a haber participado en las grandes batallas de la corta historia de Israel, y en sus agudas controversias políticas, se forjó la imagen de un político consensual, y estaba considerado como un ‘sabio’ de la nación, «un hombre impresionante».

Este miércoles, Barack Obama –cuya Presidencia ha visto la amistad de EEUU con Israel interferida por su tensa relación con el primer ministro Benjamin Netanyahu– ha rememorado la figura de Simon Peres: «La primera vez que lo conocí, fue en Jersualén, hace muchos años, cuando yo era un joven senador. Entonces, me dijo: ‘La gente piensa que el futuro pertenece a los jóvenes, pero es el presente el que pertenece a los jóvenes; déjenme a mí el futuro, yo tengo tiempo’… Y tenía razón», ha recordado el presidente de EEUU. Desde entonces, Peres trabajó desde la Presidencia de Israel por lo que siempre persiguió: ir mejorando día a día su país y las relaciones de éste con sus vecinos, que casi siempre ha sido sinónimo de enemigos.

En su última etapa política asumió, con un inmenso orgullo, el cargo de presidente del Estado de Israel, que ejerció desde 2007 hasta 2014 con infinita dignidad. Prueba de ello es que supo ser instrumento de paz desde ese cargo simbólico, concitando siempre el respeto de los enemigos de su país.

«Hoy Israel es conocido en el mundo por ser el país de la innovación y la biomedicina», recuerdan las citadas fuentes, «y ése es otro de sus legados. Fue su empeño el que llevó a nuestro país a convertirse en el líder mundial, también, de la ciberseguridad».

A sus 93 años, continuaba siendo una figura muy activa a través de su Centro Peres para la Paz, que promueve la convivencia entre judíos y árabes.