Un nuevo terremoto de magnitud 5,6 sacude Afganistán cuatro días después del que dejó 2.205 muertos
Otro seísmo de 6,0 el pasado domingo dejó más de 2.200 muertos y 3.600 heridos

Un nuevo terremoto de magnitud 5,6 ha golpeado este jueves el este de Afganistán, cuatro días después de que el pasado domingo un seísmo de magnitud 6,0 provocara 2.205 muertos y 3.640 heridos. Aún no se han informado sobre los efectos de este terremoto, el más fuerte desde el devastador del domingo.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó de que el seísmo de este jueves tuvo lugar a las 22:56 horas, hora local de Afganistán, (19:56 horas en España). El epicentro del terremoto estuvo a 36 kilómetros del suroeste de la ciudad de Asadabad, capital de la provincia de Kunar. Esta fue la provincia más afectada por el terremoto del pasado domingo. El USGS también informó de que la profundidad del seísmo fue de 10 kilómetros.
Por el momento se desconoce cómo ha afectado el nuevo terremoto a la región, fronteriza con Pakistán, después de varios días de continuos seísmos. Los talibanes han confirmado por el momento 2.205 muertos y 3.640 heridos a causa del seísmo del pasado domingo, el más letal en las últimas décadas en este país asiático, que arrastra años de crisis humanitarias causadas por las guerras, por las catástrofes naturales y por las crisis económicas y sociales.
Cuatro días después del primer terremoto, las labores de rescate continúan, aunque la esperanza de hallar a personas con vida bajo los escombros en las zonas más afectadas por el seísmo es cada vez menor. La prioridad de las autoridades locales, de las ONG desplegadas en la zona y de las agencias internacionales es ahora facilitar la entrega de ayuda humanitaria a Kunar y al resto de las provincias afectadas por los terremotos.
Una labor que se hace más compleja con cada nuevo terremoto y con el estado de las carreteras de acceso al remoto Kunar, ya que muchas de ellas han quedado impracticables por los sucesivos episodios sísmicos. El terremoto ha puesto al límite la capacidad operativa del régimen talibán, que ha desplegado en la zona su principal recurso, a sus soldados.
En los puntos donde el Estado no ha sido aún capaz de llegar, la sociedad civil ha comenzado a organizarse, con voluntarios caminando durante horas para llegar a la zona cero del terremoto, supliendo al mermado personal técnico y de emergencias, que abandonó el país masivamente en 2021, cuando los fundamentalistas retomaron el poder en Kabul.
Un terremoto de magnitud 6,0 y sus posteriores réplicas dejaron el pasado domingo 2.2305 muertos y 3.640 heridos. Los distritos de Nurgal, Sawkay, Watapur, Dara Pech y Chapi Dara fueron los más afectados, según informó Ihsanullah Ihsan, director de Información y Cultura en Kunar, una de las provincias afectadas.
El Servicio Geológico de Estados Unidos situó el epicentro del sismo principal a 27 kilómetros al este de la provincia de Nangarhar y a una profundidad de sólo ocho kilómetros, suponiendo un mayor poder de destrucción.
El temblor inicial tuvo lugar a las 23:47 horas de este domingo (19:17 GMT) y después le siguieron al menos dos réplicas de magnitud 5,2. Los equipos de rescate han trabajado desde entonces para localizar a personas atrapadas entre los escombros. Las operaciones de rescate se vieron dificultadas por los corrimientos de tierra que bloquearon carreteras clave en Kunar y Nuristán, donde más se han sentido los temblores. El seísmo también alcanzó Kabul, la capital afgana. Por el momento, las difíciles condiciones de acceso complican la llegada de la ayuda.
La Media Luna Roja Afgana y la misión de Naciones Unidas en Afganistán han desplegado equipos de emergencia, enviando medicinas, alimentos y tiendas de campaña. También se han abierto campañas de donación de sangre para atender a los heridos que desbordan hospitales ya frágiles por la falta de recursos.