Cómo hacer un saco térmico de semillas

Como una bolsa de agua caliente, las propiedades de los sacos térmicos nos ayudan en el tratamiento de todo lo que son dolores musculares o en general. Siempre viene bien tenerlos en casa así que vamos a explicaros ahora paso a paso, cómo hacer un saco térmico de semillas.
Sacos térmicos de semillas
Debido al trabajo de oficina, siempre conectado y «atado» al escritorio, cada vez hay más personas que sufren de dolor de espalda : la ciática cervical y los dolores molestos siempre están a la vuelta de la esquina.
Es esencial buscar remedios para prevenir y tratar este tipo de dolencias, que pueden ser muy molestas. En este sentido, se usa cada vez el saco térmico de semillas con semillas de cerezo en particular, pero también se puede rellenar de mijo, pino piñonero, trigo sarraceno y hierbas naturales en general. Veamos entonces cómo puedes hacerlo en casa.
Pasos para hacer un saco térmico de semillas
Hacer un saco térmico de semillas es muy fácil. Tan solo necesitas los siguientes materiales:
- tela de algodón o toalla
- Hilo y aguja
- Tijeras
- Semillas de cerezo o arroz
Pasos
- Lo primero de todo es cortar la tela. Esta tiene que ser sobre todo, una tela que resista el microondas. Una de toalla por ejemplo, te podría servir.
- Las semillas pueden ser de cerezo ya que son redondas y con ellas podrás darte un buen masaje. Otras opciones son arroz, o también puedes rellenar el saco con garbanzos, a los que añadir además unas hierbas aromáticas o unas gotas de aceite esencial de modo que cuando calentemos el saco, este desprenda un gran aroma.
- Vamos a cortar la tela como queramos, en función de si deseas un saco que sea cuadrado o una que tenga forma de almohada. Cortas dos trozos de tela que deberás coser con punto recto, y punto zig zag (los laterales), dejando además un lado abierto para poder introducir todas las semillas. Si no sabes coser no te preocupes, siempre puedes colocar las semillas en el centro de una de las telas, cierras bien y haces un nudo fuerte.
- Una vez tengas todas las semillas dentro del saco, será cuestión de acabar de coser para poder cerrarlo del todo. Asegúrate bien de que el saco no tiene obertura alguna para que no se escape ningún grano.
Ya has acabado de hacer tu saco térmico de semillas, que puedes usar tanto en frío como en caliente. Si deseas poder tratar cualquier dolor de cervicales o dolor muscula con el saco caliente, tienes que calentarlos unos minutos en el microondas pero con cuidado no te quemes. Debes probarlo en la piel antes de colocarlo del todo. Por otro lado, también puedes aplicarlo frío si lo metes media hora en el congelado antes de usarlo.
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