Vox anima a los españoles a «ser valientes» ante la inmigración ilegal y «no agachar la cabeza»
Samuel Vázquez denuncia la "inseguridad en las calles" de Villalbilla tras la apertura de un centro de menas
Critica que "el desbordamiento de las políticas migratorias" esté provocando "actos criminales"
El portavoz nacional de Vox en materia de Inmigración, Seguridad e Interior, Samuel Vázquez, ha animado este sábado a los españoles a «ser valientes» y «no agachar la cabeza» ante la inmigración ilegal descontrolada, porque está en juego «la libertad y el bienestar de las nuevas generaciones». Así lo ha manifestado en declaraciones a los medios en una visita al municipio madrileño de Villalbilla, donde ha denunciado que los vecinos sufren «inseguridad en las calles» tras la apertura de un centro de menores extranjeros no acompañados (menas).
Vázquez ha querido desplazarse a esta localidad para «rendir homenaje» a sus vecinos, que «se han rebelado contra las políticas de las élites» sobre la inmigración ilegal, en lo que ha calificado como un «nuevo 2 de mayo o una nueva Covadonga».
El dirigente de Vox ha manifestado que en dicho municipio se ha abierto un centro de menas «utilizando un chalet para evitar la petición de licencias», y se ha preguntado por qué la Comunidad de Madrid, «si tan orgullosa está de sus políticas de inmigración ilegal, permitió que hicieran esto con nocturnidad y alevosía». «Ellos sabrán lo que tienen que esconder», ha dicho.
Vázquez también ha relatado que tras la apertura del centro de menas, se produjo un intento de agresión sexual, y ante ello «el pueblo reaccionó». “Esto no va de izquierdas ni de derechas”, ha afirmado Vázquez, que ha destacado la «valentía» de los vecinos de Villalbilla al enfrentarse a este problema, «no agachando la cabeza», ha incidido.
Junto a ello, ha declarado que «lo que vive España hoy no tiene nada que ver con la inmigración, que es siempre un pacto entre un país que emite y otro que recibe por diversas circunstancias, en un proceso controlado». «Nosotros estamos viviendo procesos de inmigración ilegal desbordados», ha contrapuesto, subrayando que esto ha provocado que, con el actual Gobierno de Pedro Sánchez, «se haya duplicado el número de agresiones sexuales» en España.
Vázquez ha remarcado, además, que los amigos de la chica de Villalbilla que se han enfrentado a los agresores «no son racistas, ni xenófobos, ni rechazan el color de una piel», sino que «rechazan actos criminales provocados por la imposibilidad de gestionar el desbordamiento de las políticas migratorias que pactan PSOE y PP» y el «efecto llamada» que generan», ha apostillado..
Por ello, ha animado a todos los ciudadanos de España a que «sean valientes», como lo han sido los vecinos de Villalbilla, aunque les señalen y les insulten, porque lo que está en juego, ha dicho, «no es cualquier cosa, es la libertad y el bienestar de las nuevas generaciones», ha enfatizado.
Ley de Seguridad Ciudadana
En relación con la reforma de Ley de Seguridad Ciudadana pactada por el Gobierno de PSOE-Sumar con los proetarras de Bildu, Vázquez ha afirmado que «no solamente serán responsables Pedro Sánchez y Marlaska, sino todos los diputados que voten que sí a esta reforma legislativa». Asimismo, el responsable de Vox se ha preguntado «qué harán los concejales y diputados regionales del PSOE cuando tengan que votar» dicha reforma. «Ya no nos vale el Page de turno. Queremos hechos», ha remachado.
Por su parte, el ex vicepresidente de la Junta de Castilla y León y dirigente de Vox, Juan García-Gallardo, ha defendido este sábado la «buena fe» de la Iglesia Católica al apoyar la regularización de 500.000 inmigrantes residentes en España, pero ha añadido que lo que no puede hacer la institución es favorecer el «efecto llamada» que está «provocando tantas y tantas muertes» en el mar. Así se ha pronunciado respecto a la iniciativa legislativa popular que en este sentido se tramita en el Congreso de los Diputados.
Preguntado en una entrevista en Efe por su posición como reconocido católico y a la vez defensor de las posturas de Vox en materia de inmigración ante la defensa de la Iglesia Católica de la regularización, García-Gallardo ha remarcado que «la doctrina de la Iglesia hay que leerla en su conjunto».
De esta manera, García-Gallardo ha indicado que «la tradición de la Iglesia y los distintos papas siempre, sobre todo, es el derecho a no tener que emigrar, o sea, el derecho de una persona a poder permanecer, a tener un arraigo, a quedarse, a vivir en su casa, con su familia, en su patria, en su hogar».
García-Gallardo ha manifestado, además, que la Iglesia Católica ha defendido «siempre» el «derecho de todas las naciones a regular los flujos migratorios», desde «Santo Tomás de Aquino», junto al «deber que tiene el que emigra de adaptarse y de respetar las leyes y costumbres locales».