Revilla aprueba los presupuestos de Cantabria gracias al apoyo de un tránsfuga de Ciudadanos

El Parlamento cántabro ha aprobado este viernes los presupuestos regionales de 2018 con los votos de los grupos que sustentan al Gobierno, PRC y PSOE, y del ex diputado de Ciudadanos y miembro del grupo mixto, Juan Ramón Carrancio, en un debate centrado en las críticas al Ejecutivo por apoyarse en un «tránsfuga».

El respaldo de Carrancio ha permitido al Gobierno de Miguel Ángel Revilla contar con la mayoría necesaria para sacar adelante los presupuestos, 18 diputados frente a los 17 que suman PP, Podemos y Ciudadanos, que han votado en contra.

El Parlamento ha ratificado así el acuerdo que cerraron este mismo jueves el diputado del grupo mixto y los grupos socialista y regionalista para aprobar un presupuesto que asciende a 2.729 millones de euros, un 4,9% más que el de 2017.

Durante el debate, los grupos de la oposición han acusado a Revilla, y al secretario general del PSOE, Pablo Zuloaga, de mentir sobre la negociación del presupuesto y de «manchar» las instituciones de Cantabria.

Carrancio ha defendido que él ha sido el único diputado de la oposición que ha pensado en el «beneficio» de los cántabros y ha criticado que el resto de los grupos no hayan querido sentarse a negociar desde el principio y hayan utilizado el transfuguismo «con una cortina de humo».

El consejero de Economía, Juan José Sota, ha afirmado que el Gobierno ha antepuesto el interés general de Cantabria a la hora de conseguir el apoyo necesario para aprobar el presupuesto de 2018, porque la comunidad autónoma necesita unas cuentas el 1 de enero.

Ha subrayado que el presupuesto alcanza su máximo histórico, es «austero e inversor», y el «más social de la historia de Cantabria».