Quiroga deja su cargo al frente del PP vasco y Maroto podría ser ‘el elegido de Génova’ para dar continuidad

La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, deja su cargo este miércoles tras la «insostenible» situación de su partido a nivel regional. La dirigente ha asegurado que tomó su decisión el jueves y que, en su viaje este martes a Madrid para encontrarse con la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, esta le pidió reflexionar.

«Me voy, pero este partido continúa, sigue adelante, porque hay proyecto y personas dispuestas a sacarlo adelante. Lo van a hacer mucho mejor que yo», ha señalado. La dirigente ha pedido diculpas «a los que se han sentido ofendidos» y, en especial, tal como ha señalado, «a las víctimas que no hayan entendido lo que he hecho». «Nunca jamás era mi intencion herir sus sentimientos, porque estos años he trabajado para ser su voz», ha dicho.

Quiroga llevaba desaparecida más de una semana, pero según su entorno más cercano, tenía que ser ella quién explicara los motivos de su marcha «porque así ha querido hacerlo. Dando la cara».

No sé si estas declaraciones sentarán muy bien a sus compañeros en Génova. Desde que el miércoles pasado se viera forzada a retirar la polémica ponencia para deslegitimar la violencia terrorista. Quiroga ha desaparecido de la escena política. Primero, su equipo aseguró que era por una indisposición, después supimos que era algo premeditado. Sus compañeros la tuvieron que parar y desde Génova recibió llamadas, la de Moragas entre otros, para evitar que se ‘suicidara políticamente’. Ante la presión, la ya expresidenta del PP vasco ha querido comparecer para dar la cara y explicar a todos por qué se va.

De nuevo, el PP vasco vuelve a la inestabilidad. Incluso, Nerea Llanos, la secretaria general del PP vasco no ha tardado en dar la puntilla a Quiroga comentando horas antes: le reclamó que «no tarde mucho» en aclarar su futuro porque «la situación no es fácil». El responsable del PP de Guipúzcoa, Borja Sémper, fue algo duro tras indicar en el programa Es la Tarde de Dieter, de esRadio, que «no es explicable que no tengamos contacto desde hace seis días. No se pueden poner paños calientes», recalcando que lo ocurrido «tiene que suponer un antes y un después en la política de comunicación».

Solamente Cospedal la ha defendido en las últimas horas

Su principal defensora en estas últimos días ha sido la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, quien insistió en rechazar a micrófono abierto el posible recambio: «No hay ningún problema más, ni ninguna crisis más. No hay nada más», reiteró.

Entre sus planes estaba el celebrar los congresos autonómicos después del general, previsto para primeros de 2016. Por lo que el adiós de Quiroga supondría un revés para Génova, ya que habría que crear una gestora como hubo recientemente en Navarra. De ahí que este diario publicó en exclusiva este martes que las llamadas desde Génova eran poco halagüeñas. En el sentido que pedían a la dirigente que se lo pensara solo «por las elecciones» y por la situación «del partido». De ahí que Cospedal negara hasta el final la posibilidad de la renuncia.

Aunque desde este martes, algunos corrillos en Génova ya apuntaban que Javier Maroto, vicesecretario de Acción Sectorial, podría ser el recambio perfecto y el mejor posicionado para liderar el partido. Maroto cuenta en confianza con el presidente, Mariano Rajoy, algunos de sus ministros como Alfonso Alonso y su amigo Pablo Casado, entre los pesos pesados a nivel nacional. Algunas fuentes cercanas aseguran que este fichaje estaría a estas alturas «más que hablado, pero hay que darle tiempo al tiempo».