El PSOE acusa de violencia política a Vox pese a ser el más agredido: más de 150 ataques en 10 años
Mientras el PSOE vincula a Vox con el intento de magnicidio en Eslovaquia, los de Abascal baten récords en agresiones sufridas
El PSOE ha montado una campaña contra el PP y Vox a raíz del intento de asesinato del primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico. Mientras, desde el Gobierno se relaciona abiertamente este suceso con la «derecha y ultraderecha» y les acusan de difundir un «discurso de odio». A pesar incluso de que el agredido es un líder de derechas y el agresor próximo a la izquierda. En medio de esas acusaciones, los datos de violencia política en España apuntan a otro lado: Vox es la formación que más ataques y amenazas directas contra sus dirigentes y militantes ha denunciado en la última década -desde su fundación-, con más de 150.
En Vox, señalan fuentes de la formación a OKDIARIO, prácticamente han «perdido la cuenta» de las veces que uno de sus cargos, candidatos, militante o simpatizante ha terminado en un hospital por un puñetazo o una pedrada. Por ello, en el partido han asumido con verdadera indignación las palabras de la vicepresidenta Teresa Ribera en las que señalaba a Vox tras el intento de asesinato del primer ministro eslovaco.
«El PSOE lo tiene muy fácil, que saque cuántas denuncias ha puesto el partido por agresión con parte médico. Y comparamos», explican fuentes del partido que dirige Santiago Abascal. Según sus cálculos, en el caso de Vox ya superan las 150 agresiones y amenazas denunciadas. Algunas desveladas por este periódico, como los seguimientos a los que sometieron miembros de la plataforma independentista Tsunami -acusados de terrorismo- al candidato de Vox en Gerona, Alberto Tarradas.
En 2021, Vox intentó sacar adelante una iniciativa en el Congreso de los Diputados para poner coto a la violencia política. En su propuesta, que resultó rechazada, Vox hacía una recopilación de todos los ataques sufridos desde su fundación. El primero, a los pocos meses.
«11 de mayo de 2014, en Vizcaya. El primer ataque violento que sufrió Vox ocurrió apenas unos meses después de su presentación, que tuvo lugar en enero de 2014. Fue durante una mesa informativa en Las Arenas, Vizcaya. 10 proetarras lanzaron huevos y tiraron la mesa a patadas», comenzaba el relato de Vox.
Del «Ketchup» a Vallecas
En los diez años de vida del partido, recuerdan desde la formación, se han registrado casos incluso de apedreamientos a diputados de la formación. Ocurrió en el verano de 2020 en Sestao y su víctima fue la diputada Rocío de Meer, a la que una pedrada le abrió una brecha en la ceja. Desde la izquierda, con Podemos en el Gobierno, se acusó a De Meer de haber fingido la agresión: «Sólo hizo falta ketchup para que se tragaran un bulo», señaló el entonces portavoz Pablo Echenique.
El suyo no fue el único caso de agresión que termina con hemorragia abierta. En Zaragoza, en 2019. En Vitoria, en 2023. O en Vallecas, en 2021, donde incluso guardaespaldas de Pablo Iglesias, que hasta entonces había sido vicepresidente del Gobierno y pasaba a ser candidato de las elecciones madrileñas, participaban en un asedio a puñetazos, patadas y pedradas contra el inicio de campaña de Vox.
ZARAGOZA, BARRIO DE DELICIAS, ATAQUE ESTA MAÑANA A LA MESA INFORMATIVA DE VOX. UN COMPAÑERO AGREDIDO. LES HAN LANZADO PIEDRAS Y EXCREMENTOS.⬇️⬇️⬇️ pic.twitter.com/p3AqvrBcKV
— VOX Zaragoza (@VoxZaragoza) January 12, 2019
La última agresión en la que un candidato de Vox salió con una brecha fue en las pasadas elecciones gallegas: Darío Capas, número 10 de la candidatura de Vox por Pontevedra, repartía octavillas a las dos de la tarde cuando un hombre le llamó «fascista» y le golpeó con un paraguas hasta en tres ocasiones.
El Gobierno señala a Vox
La vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, ha vinculado este jueves el intento de asesinato a tiros contra el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, con Vox. Ribera ha asegurado que «hay que hacer algo para reducir este tipo de situaciones» porque «se empieza por violencia verbal y se acaban cruzando por el camino situaciones enormemente peligrosas». Ello, a pesar de que la víctima del intento de asesinato es un político de derechas y el atacante es un escritor relacionado con la izquierda. Además, Ribera ha vinculado el atentado con el encuentro Viva 24 de este próximo fin de semana, que reúne en Madrid a líderes internacionales como la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, o el presidente argentino, Javier Milei.
Ribera participaba este jueves en un foro sobre el reparto de fondos europeos, en el que ha estado presente también el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Tras su intervención, al ser preguntada por los periodistas, Ribera ha asegurado que el Gobierno sigue con «preocupación» la evolución del estado de salud de Robert Fico tras el ataque de este miércoles, en el que recibió un disparo en el pecho por parte de un individuo que estaba entre el público durante una visita oficial. La vicepresidenta tercera del Gobierno no ha tardado en señalar a Vox -y también al PP- e insinuar una cierta vinculación con esta acción.
«Hay que hacer algo para reducir este tipo de situaciones clarísimamente. Ningún partido constitucionalista, demócrata, debería estar alentando la violencia. Se empieza por violencia verbal y se acaban cruzando por el camino situaciones enormemente peligrosas que deterioran no solamente la confianza en las instituciones sino también la calidad de la democracia y el respeto a las personas», ha asegurado, haciendo referencia a la reciente crisis gubernamental abierta por Sánchez tras sentirse atacado por informaciones periodistas sobre los negocios de su mujer.
«No se puede estar insultando y generando irritación y agresividad permanentemente, porque en cualquier sitio puede aparecer cualquier persona desequilibrada», ha señalado la vicepresidenta tercera.
Las acusaciones del Gobierno y el señalamiento a Vox y al PP por la «violencia política», sin embargo, chocan con una realidad incuestionable: la víctima del ataque es el líder de una formación política de derechas, partidario de una agenda contra la inmigración y al que incluso la izquierda conoce como el «Trump esloveno». Mientras, el atacante, el escritor de 71 años Juraj Cintula, tiene vínculos con la izquierda. Se ha confesado votante y partidario de Zuzana Čaputová, ex presidenta por Eslovaquia Progresista -de izquierdas-, e intentó fundar su propio partido de izquierdas en 2016. Su hijo, entrevistado por la revista checa Aktualiti, no ha querido confirmar la tendencia política de su padre, pero sí ha confirmado que «no votó por Fico».
«Incitar a la violencia»
Ribera ha continuado acusando a la oposición de «incitar a la violencia, cuestionar las instituciones e insultar al presidente del Gobierno y al conjunto de los partidos democráticos». «Llamar, interpelar, como ha hecho el ex presidente Aznar, a cualquier ciudadano. ¿Qué significa eso? Por favor, debatamos con seriedad las propuestas, pero logremos entre todos rebajar el nivel de descalificativos y de tensión y angustia que puede acabar generándonos un disgusto», ha señalado la vicepresidenta.
En ese sentido, Ribera ha recordado en nombre del Gobierno que este mismo fin de semana se celebra en Madrid el Europa Viva 24, un evento internacional organizado por Vox de cara a las elecciones europeas y en el que participa Santiago Abascal junto a líderes europeos y mundiales de la derecha. Entre ellos, el argentino Milei, que acude de forma presencial en su primera visita a España, así como la italiana Meloni o el húngaro Viktor Orbán, que lo harán de forma telemática. La cita está prevista en el Palacio de Vistalegre el sábado 18 y el domingo 19.