El PP tras infligir a Sánchez la mayor derrota de la legislatura junto a Junts: «Es un punto de inflexión»

«Esto se va a agudizar, es un punto de inflexión», sostienen fuentes de la dirección del PP sobre el escenario que viene tras sufrir Pedro Sánchez este miércoles en el Congreso de los Diputados -donde le abandonó Junts- su mayor derrota de la legislatura. Con todo, y pese a la petición de elecciones que hizo ayer el propio presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, las fuentes de Génova no creen que la situación vaya a resolverse al corto plazo por parte del Ejecutivo. «Sánchez no va a cambiar su forma de gobernar», añaden las fuentes.

Ante ello, desde el PP insisten en dejar claro al Gobierno que «debe asumir cuanto antes que no tiene mayoría». Y si no lo asume, que convoque elecciones anticipadas, recalcan. Sobre todo, tras certificarse la pérdida de confianza de Junts, que ha abandonado al Ejecutivo en los dos últimos Plenos. Lo hizo el pasado diciembre cuando se alió con el PP en una enmienda para suspender el impuesto a la generación eléctrica -que finalmente decayó este miércoles en su nueva redacción- y lo volvió a hacer este miércoles, pese a que el PSOE incluso viajó a Bélgica a la desesperada para tratar de encauzar la relación con el partido de Carles Puigdemont.

Fuentes del PP ya avanzaron en diciembre que veían margen para alcanzar más acuerdos con Junts. «Es una realidad parlamentaria», señalaron. «Si no hay mayoría progresista, hay otra en la que se puede confluir», aseguraron. En cambio, Sánchez habló de «política ficción» al referirse a un acercamiento prolongado de PP y Junts.

El partido de Feijóo -después de que los independentistas descartaran la semana pasada apoyar una moción de censura (sí piden a Sánchez que se  someta a una cuestión de confianza)- ha defendido que sólo mantiene conversaciones con Junts «a nivel parlamentario sobre cuestiones programáticas» en las que coinciden ambos partidos. Fuentes de la dirección del PP no precisaron este miércoles si también hablaron con Junts sobre el sentido del voto en los dos decretos que tumbaron ayer.

Lo que sí trasladaron es que «el Gobierno no nos llamó para negociar estos decretos, empeñándose en hacer cosas mal». «Y luego se indignan…», lamentaron las fuentes del PP.

En la jornada de este miércoles, PP, Vox, UPN y Junts tumbaron en el primer pleno del año dos decretos económicos del Gobierno. Uno de ellos se trataba de un decreto ómnibus, un cajón de sastre que incluía desde una revalorización de las pensiones hasta ayudas para afectados por la DANA pasando por subidas de impuestos (no se prorrogan las bajadas del IVA de la luz y los alimentos básicos), un recorte en la financiación autonómica, desprotección de los propietarios de casas okupadas o la entrega -de «dudosa legalidad», critica el PP- de un palacete del Estado en París al PNV. El otro decreto derogado contemplaba un gravamen a las energéticas.

Frente a ello, y ante la incapacidad del Gobierno de reunir los apoyos suficientes, el PP anunció que había presentado desde este mismo miércoles en el Congreso toda una batería de iniciativas legislativas para actualizar las pensiones y cubrir estas ayudas. Eso sí, para su aprobación individual, por separado, «sin los chantajes ni los recortes del Gobierno», enfatizaron.

En materia de pensiones y respecto a las ayudas al transporte, los populares denuncian que «el Gobierno está utilizando como rehenes a los españoles para pagar los precios políticos a sus socios, poder culpar a la oposición e ir a llorar a los medios».

Dos opciones

En este contexto y para revertir su desgobierno, desde Génova remarcan que «si el Gobierno quiere hacer las cosas bien y arreglar su desastre tiene dos opciones», esto es, presentar de manera urgente un real decreto que lleve «solo y únicamente la subida de las pensiones», y el PP lo aprobará. Y lo mismo en el caso de las ayudas al transporte.

La otra posibilidad es tramitar por vía de urgencia cada una de las proposiciones de ley registradas por el PP. Cada texto del Grupo Popular lleva una sola de estas medidas, sin ninguna otra materia. Los populares aseguran que «todas las administraciones, tanto locales como autonómicas, van a mantener la parte de la bonificación al transporte que les corresponde y que estaban aplicando». Por ejemplo, el Gobierno de la Comunidad de Madrid que preside Isabel Díaz Ayuso ya lo trasladó a la opinión pública en la tarde de este miércoles.