Podemos clama contra los bancos pero tiene 37 cuentas bancarias por toda España
Podemos aprovecha cualquier oportunidad para cargar contra los grandes bancos de España pero es a ellos a quienes confía buena parte de su tesorería. Tal como comprueba OKDIARIO en las nuevas cuentas anuales del partido morado, la formación liderada por Ione Belarra mantiene abiertas 37 cuentas corrientes en bancos.
Se trata de cuentas distribuidas por toda la geografía española. Además de sus cuentas en entidades alternativas como Triodos Bank, Fiare o Caja de Ingenieros, Podemos declara cuentas en bancos tradicionales como BBVA CaixaBank, Ibercaja, Bankia y multitud de cajas de ahorro de localidades por todo el país.
Entre las 37 cuentas corrientes que califican de «no electorales» se sumarán otras tantas electorales y de coaliciones que en esta memoria no se desglosan pero que indican suman 381.000 euros en positivo en 2020 frente a los 968.000 euros que tenían en 2019.
Por cuantías, en las cuentas no electorales destaca que en Triodos en 2019 Podemos tenía 6,2 millones pero un año después sólo acumula 4,8 millones en esa entidad. Por el contrario, sube la cuenta de Caja de Ingenieros de 368.000 euros a 706.000 euros. También se disparan los 9.500 euros que tenían los morados ingresados en Fiare hasta los 1,7 millones depositados en esta entidad.
La cuenta corriente en Caixa Bank baja de 771.000 euros a 231.000 euros en un año. Por otro lado, destaca la subida considerable de la cuenta en Caja Zamora de 233.000 euros en 2019 a 745.000 euros en 2020.
Esta multitud de cuentas corrientes choca con sus ataques constantes a la banca. Los ataques de Podemos a este sector son incontables. Un ejemplo son las campañas instigadas por los morados para exigir la devolución del rescate bancario. También esta formación se ha caracterizado por pedir insistentemente un impuesto específico para la banca, o una ley que prohíba inversiones de estas entidades en partidos políticos o, incluso, en medios de comunicación. Podemos también ha abogado por una banca pública y por que paguen el impuesto de las hipotecas.
La formación que fundó Pablo Iglesias, en todo caso, viene reduciendo sus cuentas corrientes en los últimos años. En sus informes internos señalan que la dispersión de estas cuentas corrientes provoca que el equipo de Finanzas y Transparencia tenga que hacer un esfuerzo considerable para cerrar la contabilidad global del partido. Por ejemplo, han establecido que «las cuentas bancarias territoriales inactivas son reasignadas al órgano estatal para que luego sea Finanzas y Transparencia quien tome la decisión de cerrarlas o reutilizarlas para otro territorio».
Aseguran que para no tener un mayor descontrol, «cada cuenta bancaria tiene un uso exclusivo y una subcuenta del Plan General Contable para partidos políticos para poder diferenciar adecuadamente las cuentas de la gestión ordinaria, de donaciones y de la contabilidad electoral». A su vez estas cuentas pueden ser de contabilidad estatal, autonómica, o municipal, pero, «en cualquier caso, tienen una subcuenta propia a fin de que los apuntes de tesorería queden perfectamente identificados».
Evitar responsabilidades
En sus informes, Podemos subraya desde hace tiempo que el partido no tiene culpa de este totum revolutum. Dejan claro que se descargan de las posibles repercusiones en los cargos intermedios. «Las operaciones de tesorería son tarea exclusiva de los y las responsables financieros territoriales, ya que en Podemos no está permitido el uso de efectivo», esgrimen.
Una medida que Podemos se ha autoimpuesto para controlar el gasto del dinero es «un sistema de doble firma para importes relevantes». Así mismo, «el partido ha decidido no operar con efectivo por lo que, si bien dificulta el pago de pequeños servicios y el adelanto y reembolso de gastos al personal, consideramos que resulta un medio eficaz para prevenir la corrupción y asegurar la integridad contable».
En cuanto a la tesorería de Podemos, cabe destacar que en 2017 declararon 19.742.058 euros, al año siguiente, a cierre de 2018 declaran 20.530.611 euros. En 2019, fueron 10.667.671 euros y en 2020, con la entrada en el Gobierno de España, recuperaron los 12.032.585 euros.