Moncloa niega el «cierre» de colegios de educación especial pero la ley Celaá los vaciará «progresivamente»

La ministra apuesta por "afrontar un salto cualitativo que permita la incorporación progresiva a los centros ordinarios"

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Ley Celaa
La ministra de Educación, Isabel Celaá.
Segundo Sanz

El Ministerio de Educación y Formación Profesional dirigido por Isabel Celaá negó «rotundamente» este martes que se vayan a «cerrar» centros de educación especial, «tal como están difundiendo algunas organizaciones», afirmó. Sin embargo, el espíritu de la futura Ley Celaá en este sentido lo avanzó la propia ministra en el Senado a finales de 2018, cuando señaló que el plan de su departamento es ir vaciando «progresivamente» los colegios de educación especial.

Así lo recoge el Diario de Sesiones del Senado del 11 de diciembre de 2018. La ministra de Educación manifestó aquel día que «el objetivo del Gobierno es impulsar el proceso de transformación de los centros de educación especial para convertirlos en centros sectoriales de apoyo a la inclusión, que brinden el asesoramiento y la ayuda necesarios para que el alumnado que actualmente está escolarizado en esos centros específicos pueda incorporarse progresivamente a los centros ordinarios».

De igual modo, Celaá señaló que «es preciso afrontar también un salto cualitativo que permita la incorporación progresiva a los centros ordinarios del 17% del alumnado que hoy todavía está escolarizado en centros de educación especial». Y justificó la medida en que «este nuevo y definitivo paso en el camino de la educación inclusiva se está llevando ya a cabo en algunos países de nuestro entorno», esgrimió.

Ahora, en plena tramitación del proyecto de ley en el Congreso, donde se encuentra en fase de enmiendas con una nueva ampliación del plazo hasta el 6 de mayo, el Ministerio de Educación se remite al texto aprobado por el Consejo de Ministros.

Dicho proyecto de ley, según el Ministerio de Educación, dice literalmente que «el Gobierno, en colaboración con las administraciones educativas, desarrollará un plan para que, en el plazo de diez años, de acuerdo con la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas y en cumplimiento del cuarto Objetivo de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, los centros ordinarios cuenten con los recursos necesarios para poder atender en las mejores condiciones al alumnado con discapacidad». Es decir, este literal del proyecto confirma el plan de Celaá revelado en el Senado de ir vaciando poco a poco los centros especiales y fomentando la inclusión de tales alumnos en los ordinarios.

Moncloa respondió este martes a través de un comunicado a la denuncia de la plataforma ‘Inclusiva Sí, Especial También’, formada por personas con discapacidad intelectual, familias y docentes. Esta plataforma publicó el pasado domingo un comunicado contra la tramitación parlamentaria de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE), que rechazan al considerar que «va contra los colegios de educación especial».

«No puede manifestarse»

Esta plataforma acusa a PSOE y Unidas Podemos, los partidos que forman el Ejecutivo de coalición, de valerse de la situación «dramática para miles de personas que están perdiendo sus seres queridos» en la crisis del coronavirus para seguir tramitando esta reforma educativa «a espaldas de la mayoría de la sociedad que desconoce lo que está pasando y no puede manifestarse democráticamente al respecto».

La plataforma se opone a la conocida como ‘ley Celaá’ porque «promueve la eliminación de los centros de Educación Espacial», aludiendo así a su disposición adicional cuarta sobre la «evolución de la escolarización del alumnado con necesidades educativas especiales».

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