El Gobierno se atasca: todavía no tiene trazado el plan de exhumación de los restos de Franco
Se trata de la última fase del procedimiento: los trabajos de apertura de la tumba, análisis del féretro y el posterior traslado
La ministra Delgado intentó convencer a la familia para que entierre a Franco en El Pardo
A dos meses de que acabe el año, el Gobierno de Pedro Sánchez todavía no ha redactado ni una sola línea del llamado ‘Plan de exhumación’ de los restos de Francisco Franco, es decir, la última fase del procedimiento, la dedicada a los trabajos de apertura de la tumba, análisis del féretro y el posterior traslado. Este momento es el que entraña una mayor dificultad técnica. Así lo reconocen a OKDIARIO fuertes gubernamentales, que el Ejecutivo aún no se ha puesto a perfilar dicho plan de ejecución.
Las fuentes consultadas señalan que Moncloa continúa de momento en la primera parte del proceso, la relativa a la instrucción del expediente por parte de la subsecretaria de Justicia, Cristina Latorre. De esta manera, empieza a cobrar fuerza la posibilidad de que Sánchez vuelva a fallar en la previsión (sería la segunda vez) y los restos de Franco no sean exhumados del Valle de los Caídos «antes de final de año», como afirmó la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que aprobó el decreto de exhumación el 24 de agosto.
A todo ello hay que unir el conflicto entre el Gobierno y la Iglesia que se ha evidenciado esta semana, con El Vaticano negando haber acordado con el Ejecutivo socialista que Franco no termine en La Almudena y con la número dos de Sánchez anunciando una batalla legal en este sentido, con el pretexto de la Ley de Memoria Histórica de 2017. «El Gobierno tiene instrumentos para garantizar que no se enaltezca a Franco en ningún sitio ni en ningún punto del territorio», manifestó el pasado martes. El decreto de exhumación tiene un año de vigencia.
El pasado 27 junio, en un corrillo con periodistas en el Congreso de los Diputados, Sánchez deslizó que los restos de Franco serían sacados del Valle de los Caídos antes del verano. «Os pillará trabajando», llegó a decir. Sin embargo, llegó su primera rueda de prensa en La Moncloa el 3 de agosto y aplazó todo a después del parón vacacional.
Un mes después de la fotografía que publicó OKDIARIO en exclusiva -con una comitiva gubernamental visitando el Valle de los Caídos para presionar al Abad y acelerar los trámites-, todo sigue igual. Entonces, cinco altos cargos se desplazaron hasta la Basílica de la Santa Cruz: la citada Cristina Latorre Sancho, subsecretaria de Justicia; Ernesto Abati, consejero gerente de Patrimonio Nacional; Manuel Terrón, delegado de Patrimonio Nacional en San Lorenzo de El Escorial; Antonio Hidalgo, subsecretario de la Presidencia, y el presidente de Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez de Armiñán.
A raíz de aquello, la Fundación Nacional Francisco Franco pidió la recusación de Latorre como instructora del expediente. A juicio de la fundación, esta visita «sorpresiva, repentina e inesperada para los monjes benedictinos» de la instructora del proceso, subsecretaria del Ministerio de Justicia, fue «para ver cómo llevar a cabo» la exhumación de los restos de Franco «aún sin haberse resuelto» las alegaciones presentadas por los interesados. «Es innegable que la instructora organizó esa visita con una idea preconcebida llena de parcialidad y subjetividad sobre lo que hacer respecto a una exhumación tan delicada y que demanda, sin lugar a duda. mayor neutralidad y ecuanimidad», subrayó la fundación.
Etxeberría, próximo a Bildu
El pasado martes, la titular de Justicia, Dolores Delgado, recibió en el Ministerio al forense Francisco Etxeberría y al antropólogo del CSIC Francisco Ferrándiz. Ambos mantuvieron después una reunión con el director general para la Memoria Histórica, Fernando Martínez, y un asesor de la ministra. En ese encuentro abordaron «la necesidad de actualizar el mapa de fosas, de elaborar un protocolo de exhumaciones y de crear un censo de peticionarios que buscan a sus familias desaparecidas durante la Guerra Civil y la Dictadura», según informó el Ministerio.
Se da la circunstancia de que Exteberría es el forense que pilotó también los trabajos de exhumación del teniente general José Sanjurjo, cuyos restos fueron luego devueltos la cripta del Monumento de los Caídos de Pamplona por orden de un juez que falló en contra de la decisión del alcalde, Joseba Asiron (Bildu). Además, Exteberría ha realizado para el Gobierno vasco un informe que atribuye 271 falsas torturas por parte de la Ertzaintza, 1.319 de la Policía Nacional y 1.174 a Guardia Civil. Unas cifras que los principales sindicatos de estos Cuerpos han denunciado por su falta de objetividad. Tal es así, que sólo se han documentado 20 sentencias firmes con 31 agredidos y 49 condenados.
Este forense aparece también en el documental ‘Las Huellas Perdidas’ (Oinatz Galduak), emitido por la televisión autonómica vasca EiTB sobre la historia de ETA y que va a ser proyectado en las aulas del País Vasco en una versión reducida. Exteberría señala en la cinta que «las víctimas de ETA han tenido un reconocimiento institucional y les falta el reconocimiento social. Ahora vayamos a otras víctimas, que también existen y muchas. Ahí resulta que el reconocimiento social ha podido existir, pero no el institucional», sostiene. Este forense fue propuesto por EH Bildu para formar parte del la dirección del Instituto vasco de la Memoria.