Este es el vergonzoso estado de las furgonetas de los antidisturbios de la Policía Nacional en Barcelona

La Confederación Española de Policía (CEP) ha denunciado el estado «vergonzoso» de las furgonetas de las fuerzas antidisturbios UIP (Unidades Policiales de Intervención) desplazadas a Barcelona con motivo de la Diada del próximo 11 de septiembre. Armas por el suelo, armeros rotos, cartones manchados de aceite en el interior de los vehículos…

El sindicato policial muestra fotografías de algunas de las unidades de la III UIP llegadas desde Valencia y pide «condiciones dignas» al departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska para desarrollar su labor. En las fotos se ve tirados en el suelo los fusiles de asalto y las escopetas para el lanzamiento de pelotas de goma y gases lacrimógenos. «Las armas por el suelo -dicen- porque los armeros están rotos». Reclaman «seguridad YA» y advierten que las «furgonetas debían haber sido repuestas hace años».

Seguimos denunciando el lamentable estado de las furgonetas de la III UIP, cartones llenos de aceite, las armas por el suelo porque los armeros están rotos, furgonetas que debían haber sido repuestas hace años, seguridad para los 👮‍♀️👮‍♂️ YA y unas condiciones dignas pic.twitter.com/u92YI1wXfG

— CEP Valencia (@ValenciaCep) August 25, 2020

En las fotos también se ven cartones con manchas de aceite. CEP señala que «ni es higiénico ni seguro, cartones llenos de aceite que pierden los furgones y tienen que llevar dentro los compañeros. VERGONZOSO!!», exclama CEP. «Si los furgones están mal que los cambien».

Fuentes del sindicato cuentan que el estado de las furgonetas es tan deplorable que pierden constantemente aceite y que ha habido quejas de personas e instituciones «porque en operaciones de seguridad estática de edificios los vehículos manchaban la vía pública». «Aunque parezca mentira -señalan las fuentes consultadas- se está obligando a los policías a llevar esos cartones en las furgonetas, a colocarlos en el suelo cuando inician esas vigilancias en la calle y, al acabar, recogerlos y meterlos de nuevo dentro».

«Es cutre e indigno», confirma un miembro de las UIP que vivió los sucesos de octubre pasado tras la sentencia del procés. «Bastante sufrimos el año pasado y durante el 1-O como para volver en estas condiciones. Es patético -se lamenta- que nos vean poniendo cartones para no manchar la calzada teniendo el ambiente en contra que tenemos». Este veterano agente advierte que, aparte de una cuestión de imagen, está en juego su seguridad. «Si falla el vehículo en una situación de riesgo, estamos vendidos».

«Espero -señala- no tener que vivir lo de Via Laietana otra vez. Pudo haber muertos. Los buscaban», dice con claridad pensando en los CDR y en los grupos violentos que trataron de asaltar la Jefatura Superior de Policía tras la sentencia que condenó a los líderes del golpe del 1 de octubre. «Hubo momentos -recuerda- en que ya no nos quedaba nada … ni munición … ni siquiera agua».

Diada y Covid

Pese al elevado impacto actual del coronavirus en Cataluña y el peligro de un contagio masivo, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha autorizado los actos organizados por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) con motivo de la Diada del 11 de septiembre. Entre los planes de la ANC y de Òmnium Cultural está rodear edificios de la administración del Estado en la comunidad autónoma. Su seguridad compete al Ministerio del Interior en el círculo más inmediato con la ayuda de los Mossos en el entorno.

Los planes de refuerzo del Ministerio del Interior se mantienen discretamente en secreto a día de hoy. Se sabe que unos 250 policías se han desplazado ya o van a hacerlo en las próximas horas a Cataluña para reforzar al centenar de agentes de la II UIP con sede en Barcelona en los días previos y posteriores a la Diada.

Un nuevo grupo independentista radical ha amenazado con acciones violentas el 11-S. Se dicen llamar «Blanc Bloc» y ser los herederos del «Tsunami Democràtic» que protagonizó los actos de extrema violencia contra la sentencia del 1-O en la Ciudad Condal en octubre del año pasado. Fuentes policiales los ligan al mismo mundo de los CDR. «Son -dicen- los mismos perros con distintos collares».