Mas: «La resolución queda anulada jurídicamente, pero no políticamente»

Artur-Mas
El presidente de la Generalitat en funciones, Artur Mas.
Gonzaga Durán

El presidente de la Generalitat en funciones, Artur Mas, ha asegurado este jueves que la resolución independentista del Parlament «jurídicamente está claro que queda anulada; políticamente, no» con la sentencia del Tribunal Constitucional, una decisión que considera Mas considera «inconstitucional».

Así se ha mostrado el líder de CDC este jueves en los micrófonos de la Cadena Ser, asegurando que el fallo era «previsible», pero que «la voluntad del Parlament no se puede anular» debido a que ningún tribunal «puede anular el deseo de independencia de una gran parte de los catalanes». Mas ha definido a esta parte de la sociedad catalana como «significativa».

«No habiendo llegado al 50%, no se puede culminar este proceso sin pasar otra pantalla democrática en forma de referéndum o consulta», ha resaltado Mas cuando ha sido preguntado sobre el hecho de que no hay una mayoría de catalanes a favor de la independencia.

Sin embargo, ha insistido en que el TC «no puede hacer cambiar la opinión de casi la mitad de la población catalana», y ha recordado que las elecciones catalanas sí dieron una mayoría de escaños a los independentistas.

Artur Mas ha asegurado que llamará al próximo presidente del Gobierno para dialogar, y ha recordado que la resolución independentista habla de negociar con el Estado, además de con la UE: «Seguro que se pueden encontrar soluciones si todos respetamos nuestra propia legalidad».

El dirigente de CDC ha lamentado que el Gobierno central, en cambio, «ha escogido la vía de los tribunales y de las querellas en vez del diálogo», haciendo referencia a su imputación por organizar la consulta ilegal del 9N.

«Estoy metido hasta el cuello en el proyecto»

El presidente de la Generalitat en funciones ha señalado que, en el caso de que se convoquen nuevas elecciones si se alcanza el límite legal del 10 de enero para formar Gobierno, «aspiraría a presentarse de nuevo», aunque se muestra confiado en «superar el bloqueo» de las negociaciones que se están llevando a cabo entre Junts pel Sí y la CUP.

A pesar de ello, Mas ha reafirmado su antiguo compromiso de no volverse a presentarse a unas elecciones si se cumplen sus objetivos de «contribuir a culminar el proceso de transición nacional». «No he pensado en dejarlo. Estoy metido hasta el cuello en este proyecto, me he dejado la piel», ha añadido el president en funciones.

«No estoy dispuesto a ser presidente a cualquier precio»

Mas ha negado que esté «dispuesto a ser presidente a cualquier precio que pida la CUP», asegurando que la negociación con ellos está siendo «razonable».

Admite que le unen muy pocas cosas con esta formación «más allá de la independencia, pero la CUP no lo es todo», destacando que hay otros grupos con los que negociar «temas que no sean la independencia durante la legislatura».

La reincorporación de Viloca al partido

Sobre las acusaciones de corrupción al partido que lidera, CDC, Mas ha defendido que el tesorero, Andreu Viloca, haya vuelto a su puesto tras su puesta en libertad, porque «nunca perdió el cargo y está imputado».

A este respecto, Mas definido «imputado como investigado», es decir, «que se tiene alguna sospecha de haber cometido alguna posible irregularidad», y ha añadido que actuaría si le «constaran indicios de corrupción», como se hizo con el expresidente Jordi Pujol «cuando confesó». según ha argumentado el president en funciones.

Lo último en España

Últimas noticias