Zoido sobre los enfrentamientos el 1-O: «Fue por la irresponsabilidad del Gobierno de Puigdemont»

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha asegurado hoy que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, es el «único responsable» de la situación de «fractura social» que se vivió en Cataluña el pasado 1-O en la jornada del referéndum ilegal.
En respuesta a una pregunta del senador de Unidos Podemos Óscar Guardingo, en la sesión de control al Gobierno del Senado, sobre qué valoración hace el Ejecutivo de esta jornada, Zoido ha replicado que «fue la irresponsabilidad del Gobierno de Puigdemont» la que llevó al enfrentamiento.
A su juicio, es Puigdemont y «quien le acompaña» quienes han fracturado la sociedad catalana «enfrentando a unos con otros», mientras que las fuerzas y cuerpos de seguridad actuaron «en cumplimiento de un mandato judicial, con la proporcionalidad y la responsabilidad que le exige».
«Podrían haber optado por actuar de otra forma, no haber hecho absolutamente nada, como algunos hicieron», ha apuntado Zoido, quien también negó la mayor al indicar «no hay resistencia pasiva» ya que esta actitud supone «impedir que se cumpla la ley».
Guardingo ha criticado la actuación policial el 1-O que calificó de «auténtico despropósito» y un «fracaso» del Ministerio del Interior si el objetivo era que no se produjese una votación.
Podemos pide la dimisión de Zoido
Por eso, ha reclamado la dimisión de Zoido por «incompetente», ya que «al final hubo urnas», ha afirmado, y lo ha calificado de «peligro para la convivencia» y para la imagen de España en el exterior. También ha insistido en que el ministro «no se esconda detrás de los funcionarios» y dé la cara como responsable del dispositivo policial del 1-O.
Zoido ha replicado que no se esconde detrás de nadie y ha citado palabras del presidente de la Junta Electoral Central, Carlos Granado, para asegurar que la consulta no fue legal y «carece de todo valor lo presentado como resultados del referéndum».
«En España afortunadamente hace tiempo que decidimos que íbamos a vivir todos juntos y que las mayorías serían las que establecerían las reglas de juego, y no someternos a lo que unos cuantos nos intentan imponer», ha concluido, y ha añadido: «Jamás me va a encontrar diciendo que Otegi es un hombre de paz».