La sangría entre las empleadas del hogar se agudiza por el salario mínimo: cada día van 90 al paro
En septiembre, cada día han ido al paro 90 empleadas del hogar ante la imposibilidad de las familias de asumir las subidas del salario mínimo
Se agudiza la sangría de cotizantes entre las empleadas del hogar. En medio de una mejora de la afiliación a la Seguridad Social de más de 430.000 personas en el último año -de septiembre de 2023 a septiembre de 2024-, el colectivo de empleadas del hogar ha perdido en el mismo periodo 14.295 afiliadas, el peor registro de todos salvo por los agricultores -que pierden más de 18.000 en el último año-. Las sucesivas subidas del salario mínimo -ya está en 1.323 euros en 12 pagas- son la clave de por qué este colectivo está sufriendo el paro mientras el mercado laboral avanza.
De acuerdo con los datos publicados por el Ministerio de Seguridad Social, en septiembre se han dado de baja 2.721 empleadas del hogar, lo que significa que 90 personas de este colectivo han perdido su puesto de trabajo cada día. En cambio, en el régimen general -sin autónomos, mineros y trabajadores del mar- el incremento de afiliados a la Seguridad Social en septiembre superó las 5.000 personas.
En el conjunto del año, la pérdida es de 40 empleadas del hogar cada día, por lo que en septiembre ha habido una intensificación en la destrucción de este tipo de empleo.
Se da la circunstancia de que, en septiembre, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha aprobado nuevas mejoras en las condiciones laborales de este colectivo. Ahora, las familias, muchas modestas que se ven obligadas a contratar empleadas del hogar para cuidar de sus personas mayores, tendrán que abonar también cursos de formación -su equivalente en horas libres que tendrán que cubrir de alguna manera-, prevención obligatoria de riesgos laborales y revisión médica -que se podrá hacer en la sanidad pública-.
Antes de estas medidas, las familias ya han tenido que afrontar las sucesivas subidas del salario mínimo, que se ha incrementado en casi un 50% desde que gobiernan PSOE y Sumar-Podemos. La oposición de los empresarios no ha servido para frenar al Gobierno, que previsiblemente volverá a subir en 2025 el salario mínimo.
Para 2024, la subida aprobada por el Gobierno -de otro 5% más- ha supuesto para las familias incrementar el gasto en 105 euros al mes, entre salario y cotización a la Seguridad Social -que también sube cada año por el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI)-. El coste de contratar a una persona ha quedado en 1.768 euros en 12 pagas -el sueldo del trabajador es de 1.238 euros netos en 12 pagas-.
Los expertos ya habían advertido a Díaz y al Gobierno de que el incremento del salario mínimo en cantidades tan importantes provocaría una caída del empleo para los trabajadores menos cualificados, como son este colectivo y el de los agricultores.
Los datos del ministerio muestran que son los dos colectivos más afectados. Entre los dos suman 32.500 bajas en afiliación en el último año, mientras crece en casi 470.000 el resto de afiliados al régimen general. A cierre de abril había 371.538 afiliados en el apartado de empleadas del hogar: a cierre de septiembre hay 357.356 personas.
Además, se espera que en los próximos meses la creación de empleo se modere. Incluso el Gobierno ha empeorado en una décima su previsión de tasa de paro para este año y los dos próximos.
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