El regulador brasileño avisa de que pondrá duras condiciones a la compra de Oi por Telefónica
Jarro de agua fría para los planes de Telefónica en Brasil, su primer mercado por número de clientes. El presidente del regulador brasileño, el Consejo Administrativo de Defensa Económica (Cade), ha advertido en unas declaraciones públicas que la oferta de la operadora española por los activos de Oi -ha hecho una propuesta junto a Telecom Italia y Claro para repartirse los activos de este operador local- tendría duras condiciones de ser la elegida. Entre ellas, la venta de parte de la firma a otros operadores.
El responsable del Cade, Alexandre Barreto, ha advertido de que la oferta de los tres operadores líderes del país por el cuarto es una operación compleja y que, como tal, la resolución será también compleja y larga. Barreto calcula que el regulador tardará no menos de un año en tomar una decisión sobre esta operación en caso de que la oferta de Telefónica sea la ganadora.
La operadora española, líder en el país con un 34% del mercado, ha alcanzado un acuerdo para pujar por Oi -cuarto operador en Brasil con un 17% de cuota- conjuntamente con sus dos principales rivales: Claro, del millonario mexicano Carlos Slim, segundo del sector con un 24% del mercado, y Telecom Italia, tercero con un 23%.
Además de la oferta de Telefónica, también ha presentado oferta la norteamericana Highline, que tenía exclusividad en la operación hasta el pasado 3 de agosto. Pero esas negociaciones se han roto sin llegar a ningún acuerdo, según publica este miércoles la agencia Reuters, debido a que la firma norteamericana no ha querido elevar la oferta.
Ahora hay dos ofertas encima de la mesa sin ninguna exclusividad y la dirección de Oi tendrá que elegir una de las dos. El precio mínimo exigido por el operador brasileño es de 2.650 millones de euros, según comunicó a la CNMV brasileña. Telefónica y sus rivales han ofertado por 2.700 millones de euros. Oi está en concurso de acreedores desde 2016 y se prevé que convoque una reunión con ellos durante el mes de agosto para aprobar la operación.
Concentración del mercado
Pero si la elegida es la oferta de Telefónica, Claro y Telecom Italia, como creen los expertos del Santander por su mayor músculo financiero, el Cade anuncia que será duro. El presidente del organismo ha señalado en esas declaraciones públicas que una empresa que tenga más del 20% del mercado ya supone una concentración alta del mercado. Actualmente, los tres oferentes controlan ya cada uno más del 20% del sector brasileño.
Además, si la oferta de Telefónica es la ganadora se reducirían los operadores en el mercado brasileño de cuatro a tres, algo que los reguladores parecen de momento reacios a permitir. De hecho, le ha costado ya a Telefónica dar marcha atrás en alguna otra operación en Europa. El presidente del Cade ha señalado que el análisis de la operación durará un tiempo, 330 días según la norma local del país.
Precisamente ésta es una de las peticiones que hace el presidente de la operadora española, José María Álvarez-Pallete, a los reguladores a nivel mundial. En opinión de Pallete es insostenible el actual número de competidores en un mismo mercado debido a las ingentes cantidades de fondos que tienen que invertir las ‘telecos’ en redes.
Telefónica tiene pendiente también que los reguladores británico y europeo den el visto bueno a la fusión de su filial en Reino Unido, O2, con Virgin, que daría lugar al primer operador en este país. Durante la presentación de la operación, Pallete hizo referencia hasta en dos ocasiones a que los reguladores debían aprobar sin condiciones la fusión. El regulador europeo ya prohibió a Telefónica vender O2 a Hutchinson en 2014.
Temas:
- Telefónica