Cataluña da plantón al Gobierno en la reunión que permite a las CCAA gastar 2.200 millones extra

El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) ha dado su visto bueno a los nuevos objetivos de déficit público que ha fijado el Ministerio de Hacienda para los próximos años y que permiten a las comunidades autónomas un déficit público extra de 2.200 millones de euros para los dos próximos años (dos décimas del PIB). Posteriormente el Consejo de Ministros ha aprobado los citados objetivos.

Cataluña no ha votado porque el consejero de Hacienda ha vuelto a dar plantón al CPFF, ya que la Generalitat está cegada por su deriva independentista y exige negociar con la Administración Central de forma bilateral.

La principal novedad es que el departamento que dirige Cristóbal Montoro ha decidido permitir a los gobiernos regionales una brecha fiscal extra de 1.100 millones de euros para 2018, al elevar una décima el déficit público máximo permitido, hasta el 0,4% del Producto Interior Bruto (PIB).

Según el calendario aprobado por el CPFF en 2019 el tope de la brecha fiscal de las comunidades autónomas será del 0,1% del PIB (otros 1.100 millones de euros más que la primera oferta de Hacienda, en la que planteaba un déficit público del 0%).

Será en 2020 las cuentas públicas regionales alcanzaran el equilibrio presupuestario, igualando sus gastos con sus ingresos (es decir, registrando un déficit del 0% del PIB).

Las nuevas metas han sido aprobadas con el voto a favor del Estado, las comunidades gobernadas por el PP (Castilla y León, Comunidad de Madrid, Galicia, La Rioja y Murcia), Canarias y Ceuta y Melilla, frente al voto en contra de las regiones socialistas (Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Castilla-La Mancha y Valencia), salvo Extremadura, que se ha abstenido, y Cantabria.

Canarias no tenía previsto votar a favor hasta que ha negociado con el Gobierno para que le permitiera destinar el superávit que aspira a lograr este año en inversiones para el territorio insular. El acuerdo incluye también el apoyo al techo de gasto aprobado por el Ejecutivo, sumándose a Ciudadanos (que votará sí a cambio de la rebaja del IRPF para los mileuristas) para respaldar lo que es la primera piedra de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018.

El CPF ha estado presidido por la vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia y para las Administraciones Territoriales, Soraya Sáenz de Santamaría, y el titular de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro.

Este mayor margen que otorga a Hacienda a las comunidades autónomas (de 1.100 millones el próximo año y la misma cantidad en 2019) no va a afectar a los objetivos de déficit del conjunto de las Administraciones Públicas según las previsiones que maneja Montoro. Por ello, la brecha fiscal máxima será del 2,2% del PIB para el Reino de España, que es la tasa comprometida con las autoridades europeas para salir del procedimiento de déficit excesivo.

En cuanto al desglose por tipos de Administración, el próximo año la brecha fiscal máxima del Estado será del 0,7% del PIB, el citado 0,4% del PIB para las comunidades autónomas y el 0% para las corporaciones locales. En cuanto a la Seguridad Social, el agujero previsto es del 1,1% del PIB (12.100 millones de euros).

Para 2019, el objetivo de déficit del 1,4% se derivaría de un déficit del 0,3% del Estado y del 1% de la Seguridad Social, frente al 0,1% de las CCAA y el equilibrio de las corporaciones locales.