Iberdrola logra más de 1.900 millones de beneficio y acumula más de 4.000 millones en caja

Iberdrola ha logrado unos beneficios netos de 1.919,7 millones de euros hasta el mes de septiembre de este año, mejorando con un aumento del 7,8% con respecto a los resultados del año pasado. El beneficio neto recurrente ha alcanzado los 1.672,8 millones de euros, registrando una mejora del 8,5%.

En el aspecto del beneficio bruto de explotación (Ebitda), la empresa ha subido un 5,8% hasta septiembre de este mismo año, alcanzando los 5.430,7 millones de euros. De este dato, el 75% procede de las áreas de negocios reguladas de Iberdrola: Redes, Renovables y Generación México. Gracias a los buenos datos que proporcionan estas divisiones, la empresa ha mejorado su Ebitda en un 15,5%.

A lo anterior hay que añadir que el 87% de las inversiones que ha realizado la sociedad se han destinado a los negocios regulados citados anteriormente: 1.087,1 millones de euros a Redes, 514,1 millones a Renovables y 211,7 millones de euros a Generación México.

En cuanto al flujo de caja operativo (FFO), la compañía ha logrado 4.308,9 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,1%, superando de esta manera a las inversiones netas de la empresa en todos sus negocios, que han podido ascender a 2.095,7 millones de euros y registrando una subida del 6,7% con respecto a las cifras del año pasado. El 61% de este importe se ha destinado a líneas de negocio de la empresa que se encuentran en periodo de crecimiento.

Las cifras de ventas de la compañía han ascendido hasta los 23.689,6 millones de euros hasta el mes de septiembre de este año, un 6,7% más, y el margen bruto han subido un 7,3% hasta alcanzar los 9.523,9 millones de euros. De esta forma, Iberdrola continúa mejorando su eficiencia gracias a un descenso del 0,2% en su gasto operativo, si se excluye el efecto negativo del tipo de cambio.

La empresa hace públicos estos datos después de que un estudio elaborado por el doctor en Economía David Robinson informara de que España es uno de los países de Europa con mayor precio de la electricidad, en concreto el cuarto de esta lista, en muy buena parte por la intervención estatal.