El proyecto del Barcelona está bloqueado
El Barcelona anunciaba que esta temporada iba a vivir una revolución, pero no se ha llevado a cabo: ni llegan nuevos jugadores ni salen los sacrificados
El Barcelona está a punto de arrancar la temporada y el proyecto de renovación que quería llevar a cabo el club azulgrana para este curso de la mano de Ronald Koeman ni ha comenzado. La puerta de salida esta abierta, pero nadie sale por ella, lo mismo que sucede con la de entrada, por la que nadie pasa para llegar al Camp Nou.
La revolución holandesa que está tratando de realizar Ronald Koeman está estancada. De los señalados tras la debacle en la Champions League, sólo se ha ido Ivan Rakitic. Arturo Vidal o Luis Suárez están en la rampa de salida, pero no se termina de oficializar sus traspasos al Inter de Milán o Juventus respectivamente. Jordi Alba y Sergio Busquets, otros de los que iban a salir, seguirán en Can Barça. Tampoco encuentran acomodo los descartes como Junior Firpo, Umtiti o Braithwaite.
Con la operación salida parada, obviamente, la situación económica del Barcelona impide que la de entrada pueda ir bien. Las únicas caras nuevas que han llegado al Barça son previas a la contratación de Ronald Koeman. Por lo tanto, Pedri, Trincao y Pjanic firmaron por el club azulgrana un año, unos meses y unas semanas antes de que Setién fuese destituido y el holandés el elegido para manejar la nave culé.
La dirección deportiva trabajaba para fichar a un central, pero la imposibilidad de vender al polémico Samuel Umtiti provoca que no pueda entrar otro futbolista para ocupar su lugar. El elegido es Éric García, del Manchester City, club con el que mantienen abiertas las negociaciones, pero el central francés no tiene equipo que le quiera, que cubra su salario y que pague lo que reclama el Barcelona.
En la medular, Giorgino Wijnaldum ha rechazado al Barcelona. El mediocentro era el favorito de Ronald Koeman. El Liverpool le había tasado en 17 millones al estar en su último año de contrato, pero tras realizar el primer entrenamiento a las órdenes de Jürgen Klopp habría decidido permanecer en Anfield. Por otro lado, la directiva quería a un Thiago Alcántara -que ha provocado el primer encontronazo con Koeman-, que también tiene la posibilidad de continuar en el Bayern de Múnich a pesar de que todo apuntaba a su salida.
Respecto a la zona más adelantada, el Barcelona tenía claro que quería deshacerse de un Luis Suárez que cada vez está más cerca de continuar. El favorito era Lautaro Martínez, pero la operación era inviable por la situación económica que atraviesan los azulgranas. El plan B era Memphis Depay, pero la continuidad del ariete uruguayo imposibilita que el holandés pueda ponerse a las órdenes de su compatriota y ex seleccionador.