Los juguetes rotos de la NBA

Un estudio realizado por la revista ‘Sports Illustrated’ en 2009 revelaba que el 60% de los jugadores retirados de la NBA entran en bancarrota en los primeros cinco años tras dejar la liga. Un extenso número de jugadores de entre los que llaman la atención algunos de los mejores de la historia.

Allen Iverson

MVP de la temporada de la NBA. Rookie del año de la NBA. Once veces All-Star. Estos son algunos de los credenciales del que fue calificado como «el mejor jugador libra por libra» de la historia. Acumuló más de 150 millones de dólares durante sus quince temporadas en activo. Ejemplo de jugador derrochador, no era raro verle con deportivos, joyas ostentosas y colmando a su séquito con todo tipo de lujos. Su mansión de Atlanta –valorada en 4,5 millones– fue subastada por desahucio. Se le llegó a embargar una de sus cuentas debido a que tenía una deuda de hasta 800.000$ con una joyería. Problemas con su ex esposa, los casinos y las drogas –detenido varias veces por posesión ilegal– han hecho desaparecer su fortuna.

Scottie Pippen

Miembro de uno de los mejores equipos de la historia del baloncesto y compañero de Michael Jordan en los invencibles Bulls de Phil Jackson. Pippen llegó a amasar alrededor de 120 millones de dólares en sus 17 temporadas. El mítico alero tuvo a bien dejarle 17 millones a su asesor personal en el año 2000, según publicó el Chicago Tribune. Un dinero que no volvió a ver. Malas gestiones empresariales, un jet privado y lujos varios le llevaron a perder, sino todo, casi todo su dinero. Terminó vendiendo su mansión a un precio muy inferior con respecto a su valor original.

Antoine Walker

Otro campeón de la NBA que no supo administrar su fortuna. Walker ganó el anillo con los Miami Heat en 2006 y participó en el All-Star Weekend en tres ocasiones. Logró acumular 110 millones de dólares aproximadamente. Millones que se esfumaron en su séquito, una mansión en Chicago, coches o joyas. «No podía negar nada ni a mi familia ni a mis amigos de la infancia. Les daba todo. Durante mi carrera fui como un cajero automático», aseguró el propio jugador. El ex jugador de Celtics y Heat, entre otros, gastaba sin mirar la cuenta corriente. Prueba de ello es que fue detenido por extender un cheque sin fondos en un casino de Las Vegas. Un jugador que lo perdió todo, se arrepiente y quiere volver a empezar de nuevo. «He aprendido a ser más listo con el dinero y a valorar cada dolar. He visto y aprendido de los errores que cometí que me llevaron a la bancarrota con decisiones que no tuve que tomar».

Dennis Rodman

Otro de los ‘escuderos’ de Michael Jordan en los grandes Bulls de la década de los 90′.  Uno de los mejores defensores de la época. Siempre tan excéntrico, Rodman vivía al 100% su vida sin pensar lo que se podía decir de él. Ha tenido problemas y escándalos durante toda su vida. Cuando jugaba en Chicago, se dejó 80.000$ en un striptease de la ciudad. Tres esposas y varios hijos a los que tiene que pasar una pensión que en más de una ocasión le ha llevado a los tribunales por no pagarla. Según Los Ángeles Times, le debe más de 800.000 dólares a su tercera mujer. Todos estos actos llevaron a Rodman a una difícil situación financiera. Su asesora financiera llegó a declarar «Dennis está arruinado». Desde entonces ha hecho de todo para tener liquidez. Participó en un programa de televisión norteamericano de desintoxicación de famosos. Recientes son sus visitas a Corea del Norte para jugar al baloncesto invitado por el propio Kim Jong-Un. Sin duda, ‘el gusano’ no deja indiferente a nadie.

Lamar Odom

El último caso. El pasado martes le encontraron inconsciente en un burdel cerca de Las Vegas por el que está en el hospital con pronóstico reservado. Los médicos hablan de unas posibilidades de 50-50 de sobrevivir. Pero esto ha sido la gota que ha colmado el vaso. Marcado por una infancia difícil con el fallecimiento de su madre cuando tenía 12 años y la adicción de su padre a las drogas. Además uno de sus hijos murió a los seis meses de nacer. Todos le auguraban un futuro más que prometedor, y tuvo grandes años, pero su carrera ha tenido luces y sombras. Dos años después de empezar en la NBA, fue suspendido durante ocho meses por problemas con las drogas. Estuvo en un centro de rehabilitación y detenido en más de una ocasión por conducir bajo los efectos de las drogas y/o el alcohol. Su matrimonio, y sobre todo, el reality show que tenía con Khloe Kardashian le hizo más mal que bien y sus numerosas crisis hicieron su problema con las drogas y el alcohol aún mayor. Todo se le ha acumulado, y por desgracia, Odom se encuentra ahora luchando por su vida en un hospital.