Carlos Sainz: «El coche iba tan mal que era como conducir sobre hielo»

Ni en la peor de las pesadillas esperaban Carlos Sainz y Renault una carrera tan complicada como la vivida en Austria. Todo comenzaba con una salida en la que el madrileño perdía varios puestos al ser empujado fuera de la pista por otros pilotos y continuaba con el abandono de Nico Hulkenberg por rotura de motor. Carlos se quedaba solo en el equipo amarillo, pero poco pudo hacer con un monoplaza que no respondió como se esperaba.

“He salido bien pero tanto Ricciardo como Magnussen se han ido al interior, se han pasado de frenada y me han echado hacia afuera. Se podría haber hecho la remontada si hubiésemos tenido un ritmo razonable. Pero el coche iba tan mal y teníamos tanto blistering que era como conducir en hielo”, dijo Carlos Sainz al acabar la prueba.

Los problemas con los neumáticos han sido una sorpresa para todos, hasta el punto de que en el caso del Renault de Sainz los que han dado problemas han sido los más duros de todos los disponibles: “Con el neumático ultrablando parecía que íbamos bastante rápido, desde luego más que los Force India, pero ha sido poner los blandos y empezar a sufrir problemas de degradación, de blistering. No veía nada en la recta, las ruedas de atrás vibraban muchísimo, eso nos ha impedido hacer algo en carrera. No podía ni girar el volante porque el coche sobreviraba muchísimo. Hay cosas por entender y analizar, porque creo que ha sido una sorpresa para todos”.

Por suerte, Carlos Sainz y Renault no tendrán mucho tiempo para lamentarse de esta complicada carrera, y es que en apenas cinco días los monoplazas ya estarán sobre el asfalto de Silverstone para comenzar con los entrenamientos libres del siguiente Gran Premio.