Campuzano, el ‘killer’ que el Madrid le birló a todos

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Campuzano celebra un gol con el Castilla.
Iván Martín

Víctor Campuzano ya se luce con la camiseta del Castilla. El delantero catalán suma cuatro goles en los últimos seis partidos, lo que demuestra su capacidad para ver puerta. En cuanto Santiago Solari le ha dado continuidad sólo se ha quedado sin marcar ante el Navalcarnero y la Real Sociedad B. Y es que, el barcelonés es una de las grandes apuestas de La Fábrica y en el club blanco hay muchas esperanzas puestas en este joven atacante que no dudó en salir de la Ciudad Condal para recalar en la entidad madridista.

Campuzano fichó por las categorías inferiores del Espanyol procedente del Gavá en 2011. En el club perico pronto empezó a destacar, lo que le abrió las puertas de la selección catalana tras proclamarse máximo goleador cadete de toda España. En edad juvenil continuó progresando notablemente y empezó a llamar la atención de varios clubes de España y de Inglaterra. Sus buenas actuaciones tampoco pasaron desapercibida para la Federación y fue convocado con la selección española sub 19 cuando aún tenía 18 años.

En el Espanyol también se le empezó a tener muy en cuenta y en su segundo año de juvenil dio el salto al equipo que militaba en División de Honor. Además, hizo la pretemporada con el Espanyol B y, aunque en un principio parecía que se iba a quedar en el filial, finalmente a mitad de la pretemporada regresó al Juvenil A. Una decisión que no le gustó ni al jugador ni a su entorno. Este malestar se agravó cuando la entidad catalana no movió ficha para renovar a una de sus perlas hasta que llegó el mes de diciembre y ya era demasiado tarde. En un partido que jugó ante el Barcelona un ojeador del Real Madrid se queda fascinado con el futbolista y la maquinaria blanca empezó a moverse para hacerse con sus servicios.

No obstante, Campuzano y su entorno no tomaron la decisión definitiva de salir hasta que el Espanyol no le confirmó quien sería el nuevo entrenador del primer filial y cuales eran los planes que tenían con él. Al ver la dejadez de los catalanes y el interés madridista, al delantero no le costó dar el salto a La Fábrica. Además, el Espanyol decidió no llevarle convocado a la Copa de Campeones con el Juvenil A ya que el club no vio oportuno contar con un jugador que había decidido no renovar, a pesar de que era una de las estrellas del equipo. Este fue el empujón definitivo para tomar la decisión de salir rumbo a Madrid.

Un proyecto de futuro

Desde el primer momento el Real Madrid demostró a Víctor que contaba con él. Esto fue lo que más pesó para volar hasta la capital de España y dejar su casa. Aunque su núcleo familiar se trasladó con él. Su padre militó en las categorías inferiores del Barcelona y su hermano ha fichado esta temporada por el Santa Ana, un club madrileño para jugar en el juvenil. Sin duda, esto le ha facilitado mucho la adaptación al joven goleador. Además, estudia y tiene un núcleo de amigos fuera del fútbol, lo que le sirve para desconectar.

A pesar de esta estabilidad personal, los inicios en la casa blanca no fueron sencillos para él. Tras dejar de contar para el Espanyol, Campuzano decidió realizar una pretemporada en solitario con un preparador físico personal. La mala fortuna le llevó a que un día antes de comenzar a entrenar con el Castilla sufriera un esguince que se alargó más de lo previsto ya que apareció un pequeño quiste que no permitía que el tobillo sanase. Este mal comienzo inquieto a Víctor y su entorno, aunque el Madrid siempre les trasladó que lo que tenía que hacer era tener paciencia y recuperarse: era una apuesta de futuro.

Una vez olvidadas las molestias, Solari le ha dado continuidad y éste ha respondido como mejor sabe hacer: marcando goles. Titular en los últimos seis partidos, parece que se ha hecho con una posición donde el primer filial madridista tuvo problemas al principio de curso.

Mucho más que un punta

Campuzano está jugando de delantero centro, con la ayuda de hombres como Sergio Díaz o Aleix Febas por detrás. Pero Víctor es mucho más que un simple punta. Puede jugar casi en todas las posiciones de ataque gracias a su polivalencia. Tiene gol, es rápido y domina a la perfección el balón. Lo que le vale para jugar de nueve, de mediapunta o incluso por las bandas.

Sin duda, el Real Madrid se movió rápido para hacerse con una de las joyas de nuestro fútbol. En Valdebebas están en cantados con un jugador lleno de calidad y con muchas ganas de triunfar como jugador madridista.

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