No es casualidad: el verdadero motivo por el que falta el piso 13 en algunos ascensores

La triscaidecafobia y la superstición sobre el número 13 son dos fenómenos que han dejado huella en la cultura popular, especialmente cuando se habla de arquitectura y diseño de edificios. Si alguna vez has notado que en ciertos lugares como hoteles, oficinas o incluso en algunos aviones, no parece haber un piso 13, una fila 13 o un número 13 en los ascensores, probablemente te hayas preguntado por qué. La razón detrás de esta omisión es un conjunto de creencias y miedos irracionales que rodean a este número.

La triscaidecafobia es el miedo irracional al número 13, que es tan poderoso en algunas culturas que afecta incluso a la manera en que se construyen edificios, organizan los asientos en los aviones e incluso a cómo se plantean las ventas de propiedades. Este temor tiene raíces profundas en diversas tradiciones culturales y religiosas, pero su influencia se ha extendido por todo el mundo, aunque en algunos países, como Italia, el número 13 tiene una connotación positiva. Y tú, ¿te atreverías a vivir en un piso 13?, ¿o crees que el miedo al número 13 puede influir en tu decisión?

¿Por qué falta el piso 13 en los ascensores?

El miedo al número 13 tiene orígenes complejos y diversos. En muchas culturas, el número 12 es considerado un número completo y armonioso, como los 12 meses del año, las 12 horas del reloj o los 12 signos del zodiaco. En contraste, el 13 se ve como un número que «rompe» esa perfección, causando desequilibrio y caos. Esta percepción se ha alimentado por siglos de supersticiones. Por ejemplo, en la mitología nórdica, se cuenta que Loki, el dios del caos, fue el decimotercer dios en llegar a una cena en Valhalla, lo que resultó en el asesinato de Baldur, el dios de la luz, por lo que se asoció al número 13 con la mala suerte.

Otra teoría vinculada a la triscaidecafobia proviene de la religión cristiana. En la Última Cena, uno de los eventos más significativos del cristianismo, 13 personas se sentaron a la mesa, incluido Judas, quien traicionó a Jesús. Esta relación entre el número 13 y la traición ha calado en la mente de muchas personas, y es una de las razones por las que este número se considera de mala suerte en varias culturas.

Una de las manifestaciones más evidentes de la triscaidecafobia es la omisión del piso 13 en los edificios, especialmente en los ascensores. En muchos rascacielos y edificios de gran altura, si observas el panel de botones de los ascensores, verás que en lugar del número 13 aparece el 14, incluso si en términos lógicos el edificio tiene realmente un piso 13. Esta práctica no es sólo por superstición, sino también por razones comerciales. La gente con triscaidecafobia puede sentirse incómoda o nerviosa al estar en un piso 13, lo que podría disuadirlas de alquilar o comprar propiedades en estos edificios.

En algunos casos, cuando no se puede eliminar el número 13 de forma tan sencilla, los edificios optan por soluciones creativa, renombrando el piso 13 como «12A» o «12B» para evitar la connotación negativa del número 13, mientras que en otros casos, el número 13 es sustituido por letras como la «M», que es la decimotercera letra del alfabeto. Estas modificaciones pueden parecer una buena solución, pero son indicativas de cómo las supersticiones pueden influir en el diseño y las decisiones de marketing.

Números de la mala suerte alrededor del mundo

En algunas culturas asiáticas, especialmente en China, el número 4 es considerado de mala suerte. Esta creencia proviene de la similitud fonética entre la palabra «cuatro» y la palabra «muerte» en chino mandarín. Como resultado, muchos edificios en países asiáticos omiten el cuarto piso y reemplazan el número con el 3A o el 5 para evitar cualquier asociación con la muerte. En algunos casos, las matrículas de los coches o los números de las casas también omiten el número 4. Además, los chinos creen que los números que contienen el 4, como el 14 o el 24, pueden traer mala suerte.

En India, el número 8 también tiene una connotación negativa. La superstición en torno al número 8 se deriva de su asociación con Saturno, un planeta que en la astrología hindú está vinculado con el mal karma, las dificultades y la penuria. Se cree que las personas nacidas bajo el signo de Saturno o en un día asociado con el número 8 tendrán vidas difíciles y llenas de obstáculos. Debido a esta creencia, es común que las personas eviten este número.

Por su parte, el número 7 se ve de forma diferente en muchas partes del mundo. En algunas culturas, como la occidental, el 7 es considerado un número de buena suerte. La creencia se puede atribuir a diversas fuentes históricas y religiosas, como los siete días de la creación en la Biblia o la famosa frase «todas las cosas buenas vienen en siete». De esta manera, los números que causan temor en unas culturas, pueden ser símbolos de fortuna en otras, reflejando la diversidad de creencias y supersticiones alrededor del mundo.