Salud

El error en la ducha que casi todos cometen: te estás llenando de bacterias sin darte cuenta

No te duches si ocurre esto en la calle
Una mujer duchándose.
Gemma Meca
  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

Una buena ducha diaria es esencial, hay un error que cometemos todos que está haciendo que todo nuestro cuerpo se llene de bacterias. La realidad es que debemos estar muy pendientes de esos gestos que realizamos en la ducha y que pueden darnos consecuencias totalmente inesperadas. Sin duda alguna, estamos ante una serie de rutinas que pueden acabar siendo las que nos afecten de lleno. Un sencillo gesto que se queda sin hacer o una parte del cuerpo desatendida pueden tener consecuencias realmente inesperadas.

Es momento de aprovechar al máximo una forma de cuidar nuestro cuerpo que resulta esencial. No sólo debemos empezar a cuidarnos de tal forma que nos servirá para conseguir lo inesperado. Un simple cambio en un gesto clave puede marcar la diferencia. Las bacterias son las responsables de este tipo de elementos que pueden acabar siendo los que marcarán una diferencia importante. Sin duda alguna, habrá llegado el momento de apostar claramente por algunos detalles que serán los que marcarán la diferencia. Las bacterias acabarán pasando a la historia, de la mano de una serie de cambios que pueden ser claves.

Te estás llegando de bacterias sin darte cuenta

La realidad es que algo tan simple como darse una ducha debe dar sus resultados. Estamos ante una forma de realizar una tarea diaria que puede acabar siendo el que marque una diferencia importante. Habrá llegado el momento de apostar claramente por una serie de elementos que serán fundamentales.

Tocará ver qué es lo que podemos hacer para mejorar esta rutina que puede parecer sencilla, pero quizás no lo es. En un mundo cada vez más acelerado, las duchas de 5 minutos se han convertido en la mejor opción posible con algunos datos que serán los que marcarán la diferencia.

Ducharse no sólo es tirarse agua por encima para despejarse y lavarse la cabeza, hay otras partes del cuerpo que requieren una atención que quizás no le damos. Sin duda alguna, habremos llegado a ese momento en el que tenemos que apostar claramente por ciertos datos destacados.

Los expertos alertan de que no estamos dándonos las duchas que necesitamos, sino que simplemente queremos empezar a tener en cuenta algunos elementos que serán los que marcarán una diferencia significativa. Por lo que, deberemos empezar a tener en cuenta algunos detalles que serán fundamentales para conseguir una buena ducha.

El error que cometes en la ducha es este

Los pies son una de las partes del cuerpo más importantes, en general, lo de agacharse para lavarse bien los pies, es algo que no hacemos, de la misma forma que sí hacemos con otras partes menos destacadas. Para mantener una buena salud, no pasa sólo con mojar el cuerpo y secarlo, hay que limpiarlo correctamente.

El blog de los expertos del grupo Gamma nos dan una serie de consejos básicos para ducharnos correctamente.

  • La ventaja principal de la ducha diaria es que, a diferencia del baño, evita que la suciedad se estanque, por lo tanto es la mejor forma de lavar nuestro cuerpo.
  • La OMS dice que el tiempo recomendado es de no más de 5 minutos por ducha ni más de una ducha al día.
  • Las duchas mañaneras, mejor con el agua más bien fría: sí, el agua fría reduce el cansancio de cuerpo y mente por lo que te activa para todo el día. Por la noche, se recomienda el agua tirando a caliente: contribuye a dilatar los vasos sanguíneos, por lo que relaja y facilita el descanso.
  • ¿Cómo comenzar la ducha? Pues empezando tu ducha diaria por el rostro e ir bajando. Lo más recomendable es que el agua haga especial incidencia en aquellas zonas que puedan estar más doloridas.
  • La temperatura: lo mejor es que no esté ni muy fría ni muy caliente. El agua templada es que la se considera mejor para la dermis.
  • Hay que intentar no abusar de geles y champús que pueden llegar a hacer el efecto contrario al deseado. Además, es importante no dejar la piel húmeda y secarse bien.

Algo tan importante como el tiempo o la temperatura del agua puede acabar siendo lo que nos marque en estos momentos tan destacados del día. Una ducha a primera hora o por la noche, dependiendo del momento del día en el que queramos desconectar un poco es esencial.

Sin duda alguna, estaremos ante una serie de cambios que pueden ser los que marcarán la diferencia. Evitaremos la proliferación de bacterias y cuidaremos una de las partes más importantes de nuestro cuerpo, la piel. El agua, pero también el tipo de gel de ducha que usamos acabará marcando una diferencia importante en todos los sentidos. Atrévete a descubrir la forma de ducharte correctamente evitando la proliferación de bacterias.

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