Carnaval Cabezón de la Sal: disfruta de este pueblo cántabro en las fiestas

El Carnaval 2023 calienta motores y aunque seguramente tienes la ilusión de viajar a Tenerife para vivir sus grandes carnavales o disfrutar por ejemplo del de Cádiz, que duda cabe de que esta es una fiesta que se celebra por todo lo alto en España. También en los pueblos donde de forma especial destaca el Carnaval de Cabezón de la Sal y que es un pueblo cántabro que no podéis perderos así que qué mejor que disfrutarlo durante su carnaval.

Así el Carnaval de Cabezón de la Sal

Cabezón de la Sal es un pueblo de Cantabria cuya población asciende a 8.273 habitantes. Cuenta con un rico patrimonio histórico y cultural, y uno de sus principales lugares de interés es es el Museo de la Naturaleza. Los próximos 23, 24 y 25 de febrero de 2023 se celebra el Carnaval 2023, en este pueblo. Un poco más tarde que en el resto de municipios de Cantabria pero un carnaval que no os podéis perder y que de alguna manera, puedes ser la «excusa» perfecta para descubrir un pueblo con mucha historia y parajes por descubrir.

Se decidió que la fiesta tuviera lugar con posterioridad a otros lugares para atraer más visitantes ya que la región cuenta con algunos Carnavales muy importantes, como el de Torrelavega o el de Santoña, este último declarado Fiesta de Interés Turístico Nacional desde 1985.

La última vez que se celebró el Carnaval en Cabezón de la Sal como siempre fue en 2019 ya que en 2020 y 2021 la pandemia del Covid-19 obligó a la suspensión de la fiesta y en 2022 aunque se celebró lo cierto es que todavía se dieron algunas restricciones. En este carnaval, uno de los actos más importantes es la «Carrera de Autos Locos» en la Urbanización «Picu de la Torre» previa inscripción de los participantes y aunque la última edición se celebró en 2020 antes de los encierros por Covid, quizás este año se recupere esta simpática tradición con coches de todo tipo en una carrera muy divertida (a fecha de hoy no se ha confirmado todavía que se vaya a celebrar).

El día grande de Carnaval es el sábado, cuando tiene lugar el pasacalles a las 18:30 horas por las principales calles del pueblo y luego se celebra el desfile del concurso de disfraces. Por la noche, se hace la entrega de premios en la plaza del Ayuntamiento. El domingo, para poner el broche final a la fiesta, se organiza un parque infantil con música e hinchables, y a la tarde se sirve una chocolatada.

¿Qué ver en Cabezón de la Sal?

La localidad se encuentra a 42 kilómetros de distancia de Santander, la capital de Cantabria. El por qué de su nombre tiene su origen en el Imperio Romano. Los romanos le llamaron Cabezón porque así se denominaba una medida romana para la compra y venta de sal. Luego, se le añadió el «apellido» de la Sal porque esta es su principal riqueza.

A pesar de que es un pueblo pequeño, cuenta con algunos lugares de interés que merece la pena visitar, como el Palacio de la Bodega o el Poblado Cántabro. El monumento religioso más importante es la Iglesia de San Martín, situada en pleno corazón de Cabezón de la Sal.

En los alrededores del municipio, hay varias rutas de senderismo muy interesantes. Una de las mejores es la Ascensión al «Palo de Santibáñez de Carrejo», una ruta muy cómoda y accesible de entre dos y tres horas. Desde lo alto del monte hay unas vistas impresionantes del Valle de Cabezón, y si el día está despejado, incluso se puede ver Comillas.

Historia de Cabezón de la Sal

El pueblo de Cabezón de la Sal debe su nombre a que en su origen destaca por la existencia de grandes yacimientos de sal que daban trabajo a los habitantes del valle. La zona supuestamente estuvo habitada por la tribu cántabra de los salaenos, llamados así por su dedicación al trabajo. Los romanos mejoraron la extracción de sal mediante inyecciones de agua, luego el agua del agua salada se evaporaba en una fase posterior, pero el producto permanecía. Así, el nombre de “Cabezón” podría remontarse a la época de la invasión romana, ya que Kapezone era una medida utilizada en el comercio de la sal, aunque el primer documento que se conserva sobre Cabezón de le Sal data del año 817..

La situación geográfica se ha beneficiado, en gran medida, de la economía local. Durante la reconquista, Cabezón de la Sal se convirtió en uno de los puntos clave de la “Ruta de los Foramontanos”, la ruta que siguieron los cántabros que fueron a repoblar Castilla, un recorrido que se convertiría en un verdadero camino que conectaba con los puertos del Cantábrico, haciendo de la villa un lugar de descanso para viajeros y comerciantes.

Cabezón también cruzaba la carretera de “Las Asturias de Santillana” (unos valles al oeste de Cantabria y este de Asturias, entre la costa y la Cordillera Cantábrica). Bajo la jurisdicción del abad de Santillana, la villa se vio inmersa en las luchas por el poder entre las familias nobles que terminaron con la hegemonía de los Mendoza, más tarde Duques de la Infanta. Entre 1438 y 1444 se produce la primera disputa entre los señores y la población, dominada por las tropas del poeta y caballero Iñigo López de Mendoza (futuro primer marqués de Santillana).

1544 fue un año clave en la historia de Cabezón de la Sal que fue representativo de los valores de su pueblo. Los habitantes de los “Nueve Valles” se reunieron nuevamente y aportaron el dinero necesario para iniciar un pleito contra sus señores, que terminaría, cuarenta y cinco años después, con una famosa sentencia, donde la población obtuvo finalmente la libertad. A partir de entonces, la organización administrativa a partir de 1778 se denominaría provincia de Cantabria.

En el año 1979 se cerró la explotación del último pozo de sal, tras comprobar que muchas construcciones urbanas se derrumbaban por estar construidas sobre las vetas de sal.