10 grandes frases de Nikola Tesla para reflexionar
Nikola Tesla es el famoso inventor de la corriente alterna.
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Como seguramente recordarás, tiempo atrás, cuando nos propusimos determinar quiénes habían sido los científicos más importantes de la historia, incluimos entre ellos a Nikola Tesla.
Siendo uno de los más determinantes protagonistas en la historia de la ciencia y la tecnología, conocer algunos de sus ideales, pensamientos y reflexiones, parece más que interesante.
Para el que aún no lo sepa, Nikola Tesla (1856-1943) fue el inventor y promotor de la corriente alterna (la que mueve el mundo hoy en día). Sin más preámbulos, comencemos con la lista de sus frases más célebres.
Que tus logros hablen por ti
«Dejen que el futuro diga la verdad y evalúe a cada uno de acuerdo a sus trabajos y a sus logros. El presente es de ellos, pero el futuro, por el cual trabajé tanto, es mío».
La invención es el producto más importante de la mente
«El desarrollo del hombre depende fundamentalmente de la invención. Es el producto más importante de su cerebro creativo. Su propósito último es el dominio completo de la mente sobre el mundo material, el aprovechamiento de las fuerzas de la naturaleza para las necesidades humanas».
Una visión del mundo muy alentadora
“La distancia, que es el impedimento principal del progreso de la humanidad, será completamente superada, en palabra y acción. La humanidad estará unida, las guerras serán imposibles, y la paz reinará en todo el planeta”.
Trabajo no es sólo esfuerzo físico
“Me acreditan ser uno de los trabajadores más duros y quizá lo soy, si el pensamiento es equivalente a la labor, ya que he dedicado a ello casi todas mis horas despierto. Pero si el trabajo es interpretado como la ejecución definida en un tiempo específico, según reglas rígidas, entonces yo podría ser el peor de los holgazanes”.
¿Vislumbrando el teléfono móvil?
“Cualquier persona, en mar o en tierra, con un aparato sencillo y barato que cabe en un bolsillo, podría recibir noticias de cualquier parte del mundo o mensajes particulares destinados sólo al portador. La Tierra se asemejaría, pues, a un inconmensurable cerebro, capaz de emitir una respuesta desde cualquier punto.”